Gracias al Gobierno de Javier Milei, ahora tenemos la libertad de intoxicarnos comiendo comida podrida y tomando medicamentos contaminados sin que el Estado haga nada por evitarlo. (Dibujo: GROK-IA)
Gracias al Gobierno de Javier Milei, ahora tenemos la libertad de intoxicarnos comiendo comida podrida y tomando medicamentos contaminados sin que el Estado haga nada por evitarlo. (Dibujo: GROK-IA)