La fotógrafa de 27 años, Alejandra Ríos, en diálogo con NOVA comenzó a detallar sus inicios en el mundo de la imagen, recordando que “desde pequeña siempre me gustó sacar fotos a todo y autorretratarme con temporizador, pero ya, en el año 2011, en la facultad cuando la tuve como materia, realmente me abrió la cabeza y empecé a descubrir el estilo de fotografía que me apasionaba, retratos y paisajes”.

Con la creatividad que siempre la caracterizó, resaltó que le “encantaría seguir aprendiendo. Siento que siempre se puede avanzar más y más en algún momento trabajé de la fotografía en un club de aquí de Salta, Central Norte y realmente me abrió muchos caminos ya que desde ese momento pude de alguna manera empezar a trabajar de esto y sin dudas es algo que me apasiona y me hace feliz”.

En este sentido, reafirmó sus convicciones al señalar que al sacar una foto “siento que mi creatividad se activa al 100 por ciento, me gusta mucho autorretratarme y buscar la manera de que las fotos queden lo más lindas posibles, busco planos favorecedores, elementos que ayuden a la composición que quiero lograr y sumado a eso la edición que va de la mano de todo lo que conlleva la fotografía”.

“Eso en cuanto a mí, en mi día a día. Pero también me gusta mucho retratar a las personas cuando están distraídas siento que esas fotos son las más enriquecedoras para mí porque capturo momentos únicos que luego pueden ser o no significativos para otros. Me gusta sacar fotos a artistas antes y durante los shows, y me hace muy feliz hacer fotos todo el tiempo cuando me voy de viaje”, dijo.

Además, la palabra fotografía hace que le venga “a la cabeza un tren en medio de los cerros y yo capturando esos momentos mágicos, quizás porque lo viví, cuando me todo cubrir una nota en San Antonio de los Cobres y viaje en el tren a las nubes. Fue una de las experiencias más lindas, que viví”.

Pensando a futuro, Alejandra tiene las metas bien claras: “Seguir creciendo día a día y aprendiendo. En todo lo que me gusta, la fotografía, la danza, el canto y el periodismo”.

Además, como cosa no menor inició “el canto desde muy pequeña en Tartagal mi ciudad natal, localidad que se encuentra a 6 horas de Salta capital. Entré en ese momento por incentivo de la profesora de música, al coro de la iglesia del colegio Santa Catalina de Bolonia (colegio de monjas) al que fui desde los 6 años hasta los 17. Allí inició esta travesía que me acompaña hasta hoy”.

“Pasé por todos los géneros musicales, cumbia, pop, románticos, folclore y por muchos grupos musicales. Actualmente integro el grupo Atemporal de aquí de Salta capital, grupo conformado por 4 voces femeninas con quien compartimos una amistad hermosa y con quienes he tenido la posibilidad de hacer gira en el verano y estuvimos en la serenata a Cafayate, Festival de Molinos, Mar del Plata en el espacio Clarín entre otros. Siempre que me hacen una nota cuento que, me da mucha emoción poder cantar con grandes voces de Salta y que a veces cuando estamos ensayando se me pone la piel de pollo, como decimos aquí, al escuchar el talento y el sentimiento que transmiten mis compañeras".

"Estamos por sacar un videoclip y estamos haciendo shows vía streaming por la plataforma Start Group show y aprovecho para contarles que se viene uno muy pronto, denominado “ADN salteño” por el momento la fecha prevista es el 11 de octubre, y digo prevista por que nos estamos adaptando a los protocolos y restricciones del gobierno de la provincia, claramente por la situación de coronavirus y el aumento constante de casos en nuestra ciudad”, resaltó.

Por último, hizo especial eje en el periodismo, el cual ella también ejecuta y dijo: “Lo veo con muchas falencias no específicamente por los periodistas sino por los medios de comunicación, como institución y/o empresa. El trabajo lamentablemente está cada vez más subestimado y devaluado, el pago no es el que corresponde y muchos trabajan en negro, pero espero que pronto esa situación pueda cambiar ya que hay muchos profesionales apasionados por este trabajo, sin dudas muy sacrificado y que implica muchas horas de nuestro día, incluso cuando no estamos en horas laborales”.