El príncipe Harry habría considerado cambiarse el apellido por el de su madre, Lady Di

El príncipe Harry estuvo a punto de romper otro lazo simbólico con la familia real británica: cambiar su apellido. Según se reveló, el hijo menor del rey Carlos III llegó a contemplar la idea de reemplazar su apellido oficial, Mountbatten-Windsor, por el de su madre, Spencer. Sin embargo, su tío materno, Charles Spencer, lo convenció de no dar ese paso.
La conversación habría tenido lugar durante una de las visitas de Harry al Reino Unido, ya instalado en Estados Unidos junto a Meghan Markle y su hijo Archie. Según fuentes cercanas citadas por el medio británico, el encuentro fue cordial, pero el conde Spencer le recomendó no avanzar con la modificación. “Tuvieron una conversación muy amistosa y le aconsejó que no diera ese paso”, señalaron.
Según medios británicos, el príncipe Harry consideró dejar el apellido Mountbatten-Windsor y adoptar el de su madre, Spencer, para alejarse simbólicamente de la familia real del Reino Unido.
— Noticiero Hechos 📱💬 (@NoticieroHechos) June 3, 2025
Durante una visita a su país, consultó la idea con su tío Charles Spencer, quien le… pic.twitter.com/4PIIyrSDnn
Cambiar legalmente el apellido, especialmente siendo miembro de la familia real —aunque distanciado—, implicaría una serie de complejidades legales que afectarían también a sus hijos, Archie Harrison y Lilibet Diana, ambos registrados como Mountbatten-Windsor al momento de su nacimiento.
El apellido en cuestión fue creado en 1960 por decreto de la reina Isabel II, combinando el suyo con el del príncipe Felipe, su esposo. A pesar de llevar ese apellido legalmente, los miembros más visibles de la familia real son comúnmente identificados por sus títulos. Así, Carlos fue Carlos de Gales, como Diana fue Diana de Gales, hasta que sus hijos recibieron ducados al contraer matrimonio: Guillermo, duque de Cambridge; y Harry, duque de Sussex.
En su autobiografía Spare, publicada en enero de 2023, Harry expuso con crudeza su experiencia dentro de la institución real, pero omitió este episodio particular. La idea de adoptar el apellido de su madre habría sido un gesto de ruptura simbólica con la monarquía y de identificación con la figura de Diana, ícono global de empatía y sensibilidad.
La tensión entre Harry y la familia real quedó expuesta públicamente el 9 de enero de 2020, cuando él y Meghan anunciaron su retiro como miembros “senior” de la Corona y su intención de alcanzar la independencia financiera. Aquel comunicado marcó un antes y un después en la historia reciente de la realeza británica.