
Y al final el pez por la boca muere. Si bien Salta Independiente nunca fue del todo independiente, esta vez, sin metáforas, podríamos hablar de cierta dependencia. Y cuidado, no es una crítica, solo la sensación levemente molesta de que por más que alguien saque la cabeza de vez en cuando todos juegan para el cacique.
Bernardo Biella, el doctor de la familia, será el candidato de Gustavo Sáenz a ocupar la banca de Senador Provincial por el departamento capital. Lo confirmó el ministro de Gobierno, Derechos Humanos y Trabajo de Salta, el ingeniero Ricardo Villada, quien a su vez es el presidente del Partido Primero Salta. El anuncio de Villada da a entender que el mayor de los hermanos Biella no competirá con el sello familiar, Salta Independiente, sino que se subirá a un auto de la escudería saencista.
¿Era previsible? Claro que sí, con el diario del lunes, obviamente. Paula Benavidez, María Emilia Orozco, que no fue, ya ocupa un cargo dentro del ejecutivo provincial. Benavidez arribó al gobierno provincial a fines del año pasado, ocupando el rol de secretaría de Estado de Gobierno de Salta.
El nombramiento de la apoderada del partido biellista fue tomado como un desembarco, más formal que real, ya que de un modo u otro siempre se supuso que “los Biella” mantenían buenas relaciones con Grand Bourg.
¿Es una buena opción? Depende… y es que, en Salta, en este momento, solo hay tres personas que pueden romper el arco electivo provincial a niveles escandalosos. Dos de ellos están en funciones ejecutivas, la tercera en la Cámara baja nacional.
La determinación de la ya citada, María Emilia Orozco, podría generar una inclinación de la balanza significativa en caso de que su espacio decida ponerla a jugar en la vereda contraria a Biella, esto es, como candidata a Senadora Provincial. De momento La Libertad Avanza no hace declaraciones al respecto y esta es, tal vez, la gran incógnita respecto al departamento más importante de la provincia.
Bernardo Biella, así, se presenta como una opción sólida e inteligente por parte de Gustavo Sáenz. Guste o no, el mayor de los Biella está muy por encima de quien sonaba como el bendecido para tamaña responsabilidad. En el senado provincial hay que tener cierto expertise… no vaya a ser que quien ocupe esa banca vaya a quemarse la boca con agua del termo.