La exlegisladora no tuvo piedad: “Milei hace lo mismo que Trump, produce una estafa piramidal”, sentenció. Sin filtros, Carrió se lanzó al ruedo, desafiando con fuerza a aquellos que siguen al exmandatario estadounidense "a pie juntillas", mientras el mundo observa una política premoderna llena de crueldad y retroceso democrático.

Carrió no se limitó a las críticas a nivel local. En su cruzada contra el "populismo de derecha", también se refirió al impacto negativo que el liderazgo de Trump y su "legado" ha tenido en la política global.

A su juicio, el expresidente de Estados Unidos representa una "calamidad histórica" no solo para su país, sino para el equilibrio mundial, abriendo la puerta a líderes autoritarios y políticas regresivas que ponen en peligro la estabilidad de democracias ya frágiles. La líder de la Coalición Cívica no dejó pasar la oportunidad de señalar que el estilo de gobierno de Trump ha sido una de las peores plagas para las democracias occidentales.

Con una actitud desafiante, Carrió expresó que la "alianza ideológica" entre Milei y Trump es una fórmula peligrosa que exacerba las divisiones sociales y económicas. Según Carrió, Milei, al igual que su homólogo estadounidense, apuesta por un modelo económico que favorece a las élites y deja de lado a los sectores más vulnerables de la sociedad.

El auge del populismo de derecha, sostenido por promesas de un "cambio" que, a su juicio, no hace más que profundizar la injusticia social, es para Carrió una "estafa gigantesca" que pone en peligro los avances democráticos conseguidos con tanto esfuerzo.

En un clima político ya de por sí tenso, las palabras de Carrió generaron un terremoto. Mientras el gobierno de Milei avanza con sus reformas económicas, sociales y políticas, voces como la de Carrió se alzan en defensa de un modelo de país más inclusivo y respetuoso de los derechos humanos. La exdiputada, alejada del escenario político activo, se ha convertido en una voz crítica con una visión clara: es necesario frenar el avance de lo que considera un "modelo autoritario" que, lejos de solucionar los problemas de Argentina y del mundo, los profundiza.

La tensión entre quienes defienden el "cambio" prometido por Milei y aquellos que lo ven como un paso atrás para la democracia parece haber llegado a su punto álgido. Sin dudas, la exlíder de la Coalición Cívica no dudará en seguir siendo una de las voces más críticas en este escenario.