VIDEO | Conocé el "Lado B" de la salida de Matías Abaldo de Gimnasia envuelta en polémica

El talentoso Matías Ezequiel Abaldo Menyou, una de las promesas más brillantes del fútbol uruguayo, ha dejado Gimnasia y Esgrima La Plata (GELP) envuelto en un escándalo que combina ludopatía, desamor y graves acusaciones contra la dirigencia del club.
Nacido en Montevideo el 2 de abril de 2004, Abaldo debutó profesionalmente con Defensor Sporting en 2022. Su llegada a Gimnasia en agosto de 2023 generó grandes expectativas, que se confirmaron rápidamente cuando en su debut contra Vélez Sarsfield asistió y marcó para cortar una racha de 11 partidos sin victorias. A sus 20 años, se perfilaba como el nuevo ídolo tripero, según informó Primera Página.
El hipódromo y las sombras del poder
El joven jugador cayó en las redes de una adicción que, según fuentes cercanas al club, habría sido incentivada por el propio presidente de Gimnasia, Mariano "La Yegua" Cowen.
Todo comenzó con una invitación al Hipódromo de La Plata, donde Cowen es administrador general. Lo que inició como un simple entretenimiento se transformó en una obsesión, alimentada por frecuentes visitas a la oficina del dirigente en el circo hípico, detalló Primera Página.
“Cowen estaba locamente enamorado de Abaldo y hacía cualquier cosa para tenerlo cerca”, afirmó un miembro de la Comisión Directiva que pidió no ser identificado. Las apuestas al turf, inicialmente un pasatiempo, se convirtieron en una peligrosa adicción que llevó al futbolista a gastar fortunas en un par de días de carreras.
El quiebre personal
La situación afectó profundamente la vida personal de Matías. Su novia, una joven uruguaya que lo acompañaba desde sus inicios, descubrió la adicción y, según conocidos, también un vínculo que calificó de “inapropiado” entre el jugador y Cowen.
Desilusionada y dolida, decidió terminar su relación con él, dejando al futbolista hundido tanto en lo emocional como en lo profesional. Así lo describieron allegados en diálogo con Primera Página.
Un compañero de equipo de Abaldo fue categórico: “La culpa es de esa yegua hija de puta”, en alusión al presidente del club. Y agregó: “Lo metió en dos juegos perversos: las apuestas y algo más personal entre ellos”. Este testimonio, también recogido por Primera Página, refleja el ambiente tenso que rodeaba al jugador en sus últimos meses en el Lobo.
El final de la promesa en el "Lobo"
Matías Abaldo, que en poco tiempo pasó de héroe a víctima, decidió abandonar Gimnasia para buscar refugio lejos de La Plata.
Su futuro futbolístico es incierto, pero lo que es seguro es que su paso por el "Lobo" será recordado más por el escándalo que por sus logros en la cancha.
Este caso, como resaltó Primera Página, pone en el centro de la discusión la responsabilidad de las instituciones deportivas en el cuidado de sus jóvenes talentos, especialmente frente a las tentaciones y abusos de poder que pueden destruir carreras y vidas.