Meta "libera" el odio: permite llamar "enfermos mentales" a las personas LGBT+ bajo el nombre de libertad de expresión

Meta acaba de dar un paso gigantesco hacia el abismo del discurso de odio: Mark Zuckerberg, en su afán por “liberar” las plataformas de la censura, ha decidido que ahora será permitido llamar “enfermos mentales” a las personas LGBT+ en sus redes. Con esta nueva política, Facebook, Instagram y Threads pasarán de ser simples canales de comunicación a verdaderos escaparates de insultos y desinformación, bajo la excusa de la “libertad de expresión”.
Las reglas, que fueron actualizadas esta semana, continúan prohibiendo los ataques a la salud mental en general, pero, ¡oh sorpresa! Todo cambia cuando se trata de la comunidad LGBT+. Según Meta, se permitirá acusar de enfermedad mental o anormalidad a las personas trans u homosexuales, amparándose en el “discurso político y religioso” y el uso común de términos como “raro”.
🚨I 🇺🇸🏳️🌈 SOLO PASO A RECORDARLES: Las nuevas directrices de Meta permiten a los usuarios decir que las personas LGBT+ son enfermas mentales. pic.twitter.com/PFcqbFdX7y
— 🔰Guardianes Patrióticos (@Patrioticos_RD) January 8, 2025
Es un claro guiño a los sectores más conservadores que, por fin, ven en esta medida una victoria para la libertad de opinar de manera destructiva y divisiva.
El impacto de esta decisión ya está generando revuelo. Stonewall, la mayor organización LGBT+ del Reino Unido, ha pedido urgentemente una reunión con Meta, pues teme que esta medida refuerce el odio y la desinformación en línea. En palabras de Simon Blake, director ejecutivo de la organización, “el odio y la desinformación en línea dañan la forma en que la sociedad ve y trata a los grupos marginados y socavan la cohesión social”.
Pero no solo las personas LGBT+ tienen razones para preocuparse: esta nueva política abre la puerta a un discurso tóxico y agresivo, impulsando más la división que la construcción de comunidad. El portavoz de Stonewall fue claro al señalar que Meta está anteponiendo la política a las personas, a pesar de que muchos ya están alertando sobre la creciente toxicidad de las interacciones en sus plataformas.
Como si esto fuera poco, Zuckerberg también anunció la eliminación de los verificadores de hechos de terceros, sustituyéndolos por un sistema similar al de “notas comunitarias” de X. Con esto, se fortalece la idea de que cualquier tipo de contenido, ya sea cierto o falso, puede ser compartido sin filtro, solo en nombre de la tan mencionada libertad de expresión.
La respuesta de Zuckerberg ante esta ola de críticas fue simple: “Las plataformas de Meta están diseñadas para ser lugares donde las personas puedan expresarse libremente. Eso puede ser un caos”. Y en ese caos, el dueño de X, Elon Musk, no se quedó atrás y calificó la eliminación de la moderación como “realmente emocionante”.
Este “nuevo orden” en Meta, donde la desinformación y el odio se disfrazan de libertad de expresión, deja claro que, para algunos, el caos y el daño social son el precio a pagar por un discurso sin restricciones.