Ante esta situación, Sánchez llamó al servicio de emergencias 911 y un amigo presente en la propiedad también escuchó ruidos en la puerta trasera. Sin embargo, debido a demoras en la respuesta de la policía y a la intervención de la seguridad privada, los intrusos pudieron escapar antes de que llegara la ayuda policial.

Karina Sánchez ha estado denunciando a su vecino, Fabián Savignano, desde hace más de seis años. Savignano la hostigaba inicialmente por correo electrónico y posteriormente la amenazó de muerte, un incidente que quedó registrado en video. Además, hace cuatro años, Sánchez denunció a Alejandro Fisscher, socio de Savignano y presidente de la sociedad propietaria del country El Paraíso.

A pesar de la contundencia del video (se puede ver en esta nota https://www.agencianova.com/nota.asp?n=2022_9_20&id=114630&id_tiponota=24) y las pruebas presentadas, la Justicia de La Plata caratuló la causa como amenaza simple y considera que el empresario podría saldar su deuda con un año de servicio comunitario (probation). Sánchez acusa a la justicia de encubrir a Savignano, alegando que su influencia económica ha influido en la decisión judicial.

Los fiscales Juan Pablo Caniggia y María Elvira Rovira, junto con el juez Diego Tatarsky del Juzgado Correccional Número 5 de La Plata, han sido señalados como los encubridores del empresario.

Sánchez también ha enfrentado dificultades para ingresar al country, ya que se le impide el acceso por la entrada de los propietarios y debe utilizar el acceso para visitantes, lo que a veces le ha llevado hasta dos horas llegar a su casa.

La persistencia de estos mensajes intimidatorios y la aparente influencia del poder económico de Savignano sobre la Justicia mantienen a Karina Sánchez en una situación de constante peligro y preocupación.