Es puro carisma arriba del escenario y es uno de los emblemas del folklore argentino. Muchos queremos que esté bien, por eso preocupa cuando en el entorno de la cantante Soledad Pastorutti se habla de una crisis con su marido Jeremías Audoglio.
La pandemia mantuvo muy tranquila a la farándula en relación a crisis o separaciones, incluso a escándalos, pero de a poco todo se va a abriendo e, incluso, tanto encierro parece haber sacado lo malo de las personas.
Según fuentes cercanas a la pareja, el marido de “La Sole” no disfruta de ver cómo su mujer trabaja en otros ámbitos que no se traten de grabaciones musicales o espectáculos. Incluso llama la atención cómo en su último trabajo "Parte de mí", lanzado el año pasado, hay mensajes ocultos que hablarían de esta crisis que viene hace un largo tiempo y que la pandemia terminó de profundizar. Su reaparición en los medios de la mano del conductor y productor de “Morfi”, Gerardo Rozín, fue casi un salvataje que la ayudó a salir de su casa.
La información da cuenta que Audoglio no quiere verla trabajando en televisión; estas apariciones los domingos y la maratón semanal de “La Voz”, en el prime time de Telefé, no son de su agrado.
Las asesoras de imagen de la cantante tratan de mostrarla muy fresca, más sexy por algunos momentos, y hasta ella se anima a elogiar de manera desmedida a algunos participantes del reality, pero por dentro no quiere volver a su entorno familiar por la crisis matrimonial que debe afrontar diariamente.
Soledad trata de mantener un total hermetismo en sus trabajos, pero en varias oportunidades se la vio perdida y muy pensativa, aunque ayuda mucho la carga laboral para mantenerla ocupada. Sin dudas esta historia continuará, lamentablemente, para la preocupación de sus fans.
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