El 4 de Febrero de 1955 (meses antes de que la Fusiladora asalte al Gobierno democrático de Juan Domingo Perón) se expropiaba el grupo “Bemberg” (dueño de lo que actualmente es la Cervecería Quilmes).
El hallazgo de estos hermosos grabados asirios, que normalmente solo se encuentran en palacios reales, arroja luz sobre las impresionantes obras públicas respaldadas por un líder célebre por sus proezas militares.