El ministro de Economía, Sergio Massa, hizo un balance en el último día de vigencia del Programa de Incremento Exportador (PIE) o dólar soja, que ascendió a 8.123 millones de dólares de exportaciones argentinas. De ese monto, el ingreso total declarado, pagado e incorporado a las operaciones del Banco Central fue de 7.646 millones de dólares.
“El mercado chino se derrumbó”. Es la frase que se repite entre los exportadores de carne vacuna que expresan su preocupación porque, advierten, que en septiembre hubo una fuerte caída de los precios de los cortes a ese destino. Por otro lado, ya temen que los contratos de la mercadería que está en los barcos rumbo al mercado asiático sean renegociados a la baja.
Sin dudas que vivir en Argentina no es para cualquiera. Y mucho menos en un Gobierno que tiene menos palabras que un telegrama y una visión de futuro con miopía. Resulta que los anuncios de mitad de año sobre el no aumento de los combustibles en lo que resta del año, podría quedarse en promesas que se las lleve el viento. Y es que, al parecer, otra “mentirita” de Alberto Fernández y su Gobierno, sería que los combustibles, aumentarían una vez más, su valor.
La tremenda situación económica que angustia al país; con cifras espeluznantes de pobreza e indigencia, una inflación que no tiene arreglo, un dólar desbocado que devalúa a la moneda nacional sin ton ni son, y los sueldos de los trabajadores cada vez más desvalorizados, generan un clima de pesimismo y malestar en todos los sectores de la sociedad. Las medidas del Gobierno no funcionan, se acerca fin de año, y todo tiende a empeorar.
El índice de salarios se incrementó un 5,5% en julio, lo que representó un aumento sensiblemente por debajo del 7,4% que creció la inflación en el mismo mes. En la medición interanual, los salarios crecieron un 68,7% frente a julio de 2021, mientras que en ese lapso el Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió un 71%.
La tremenda crisis económica que afecta a la Argentina, propiciada por el Gobierno de Alberto Fernández y la runfla kirchnerista, no deja títere con cabeza, y todos los indicadores del país arrojan números alarmantes. El panorama nacional desalentador se ve reflejado en la desconfianza a nivel global, y como consecuencia, este jueves volvieron a caer las acciones y bonos soberanos, mientras que subió el riesgo país.
En lo que va del año, el dólar informal avanza 82 pesos (39 por ciento más) después de cerrar el 2021 en los 208 pesos.
Luego de que el ministro Sergio Massa presentara en el Congreso el Presupuesto para 2023, Gabriel Rubinstein, secretario de Programación Económica, no tardó en hacer un descargo a través de su cuenta de Twitter, donde explicó las razones por las que el 60 por ciento de inflación para el próximo año no es algo muy alejado de la realidad.
El panorama en Argentina pinta negro para todo el mundo; entre la inflación, pérdida de poder adquisitivo de los salarios, y las medidas de un Gobierno inoperante que cada vez que “agarra la lapicera” es para causar más problemas, el país se ve sumido en una crisis angustiante. En esta última semana, no obstante, los que peor ven son quienes están vinculados al trasporte automotor.
El ministro de Economía, Sergio Massa, confirmó que impulsará una modificación en el régimen vigente de las importaciones y criticó el esquema actual en el que consideró que existen “situaciones casi absurdas en las licencias automáticas”, según explicó ante representantes de la Cámara de Diputados en su presentación del proyecto de ley de Presupuesto 2023. Ahora si que se enojó y pego volantazo, ¿se dará vuelta como hace de costumbre?
La tasa de pobreza se ubicó en 36,5 por ciento en la Argentina al cierre del primer semestre de 2022, equivalente a 17,3 millones de personas, según informó este miércoles el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Esto se produce a raíz del tenso sabotaje del Sindicato Único de Trabajadores del Neumático (SUTNA) sobre los tres fabricantes más importantes del país. Como era anticipable, la producción automotriz está completamente paralizada.
El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) informó que la pobreza llegó a 36,5 por ciento y alcanzó a 17,3 millones de argentinos en el primer semestre de 2022. En tanto, el nivel de indigencia fue del 8,8 por ciento en los primeros seis meses del año. Vamos para atrás y sin retorno.
La situación económica, social y política de Argentina es alarmante, y desde hace meses que los problemas que angustian al pueblo trabajador no hacen más que agudizarse, como en el caso de la inflación, la pérdida del poder adquisitivo, y la devaluación del peso frente al dólar. Mientras el Gobierno dirime internas y discute nimiedades, parece que es el único sector de la población incapaz de ver el desastre que ha causado.
El dólar blue anota su segunda suba consecutiva este miércoles y opera en máximos en cuatro semanas. Cabe recordar que el dólar informal viene de registrar su mayor avance semanal en dos meses: entre lunes y viernes de la semana pasada acumuló un alza de 10 pesos.
El ministro de Economía Sergio Massa pidió a las empresas que accedan a sentarse nuevamente a la mesa con el sindicato en la cartera laboral, algo que las empresas rechazaban por sentirse “extorsionadas” por la actitud sindical, con plantas tomadas. Si mañana no aparece la solución, el Gobierno “tiene la voluntad política” de liberar las importaciones, según dijo el secretario de Industria, José Ignacio de Mendiguren, luego de la reunión realizada en el Palacio de Hacienda. Se calentó Sergio muchachos, saquen los dólares del banco.
El INDEC confirmó que el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) registró una caída del 0,04 por ciento en el mes de julio. El frenazo de la economía es consistente con el brutal aumento inflacionario registrado en el mismo mes.
La situación económica del país es alarmante, y mientras la inflación no da tregua y devora sin piedad ni respiro a los salarios de la clase trabajadora, las medidas del Gobierno ayudan poco y nada en el mejor de los casos, o empeoran las condiciones. Debido a la batería de trabas impuestas desde el Estado y con la crisis golpeando fuerte en todos los sectores, la actividad económica está enfrentando un momento de estancamiento notable.
El Gobierno argentino y de Estados Unidos intercambian información de cuentas de sus ciudadanos, desde los 50 mil dólares, según confirmaron dos altas fuentes de la Administración Nacional.
Con el país atravesando una tremenda crisis económica que hace que los ingresos de los laburantes se devalúen a un ritmo escandaloso a causa de la inflación, y con la presión de la suba del dólar como amenaza constante a la estabilidad monetaria, desde el Gobierno han intentado con poco y escaso éxito reducir el déficit fiscal del país, tratando de empujar el carro con las típicas jugadas de restricción del mercado.