Los movimientos en el Ministerio de Economía desde el 3 de julio que renunció Martín Guzmán, el fugaz paso de Silvina Batakis y la reciente asunción de Sergio Massa dispararon las expectativas de inflación a más de 90 por ciento para 2022.
José Ignacio de Mendiguren, el autor de la criminal pesificación asimétrica que destruyó al país en el 2002 pero que sirvió para liquidar la deuda en pesos de los “amigos” de aquellos que destituyeron a Fernando de la Rúa, volvió con un mensaje alejado de la realidad, otra vez: “La Argentina está generando dólares, no es verdad esta crisis que nos quieren imponer”
El dólar blue volvió a subir este viernes 5 de agosto, y se ofreció a 292 pesos en las cuevas de la city porteña, mientras los financieros dejaron de bajar y cerraron también en alza.
El plan base de fases del nuevo ministro de Economía, Sergio Massa, tomó un rumbo diferente para inyectarle reservas al Banco Central, sin optar por la devaluación ni el desdoblamiento. De esta manera, busca evitar lo que podría ser un mayor descontrol ante el peligro por el desborde financiero.
A la agenda heredada por Sergio Massa como nuevo ministro de Economía no le falta nada. Entre sus antecesores, Martín Guzman y Silvina Batakis, se las arreglaron para dejar tantos frentes en llamas como les fue posible: un dólar a precio altísimo, una inflación sin techo a la vista, un sinfín de planes para mantener vagos, las arcas del estado casi vacías, los salarios horriblemente depreciados, y además, deudas y compromisos financieros para todo gusto.
Se puso en marcha su gestión al frente del Ministerio de Economía. Luego de anunciar las primeras medidas, se reunió con su equipo para revisar las prioridades de cada área.
La comunicación del Banco Central de la República Argentina “A” 7532, del 27 de junio de este año, señala que cuando los cupos de las importaciones de banana caen a la categoría B, entonces se podrán pagar por los mismos entre 180 y 360 días después de los envíos, dependiendo de la posición arancelaria del producto.
El nuevo secretario de Producción Jose Ignacio De Mendiguren, fiel a la doctrina peronista, sigue esquivando a la realidad convencido de que vive en un mundo de fantasías; dijo que la macroeconomía (de Argentina) es casi mejor que la de Estados Unidos, y añadió que se deben poner límites al acceso a créditos para quienes se cubrieron de más con los precios. En la pandemia hubo el mayor rescate al sector privado que jamás se vio: hasta te pagaran los sueldos. Llegó el momento de que el sector ayude a la situación.
La inflación genera 10 veces más inseguridad que la posibilidad de sufrir un robo. Hay un 500 por ciento de argentinos respecto del año anterior que hacen compras solo cuando tiene plata. Y solamente un 3,3 por ciento de la población le gustaría que siguiera gobernando el oficialismo.
Gracias a los genios del voto, tendremos que sufrir el tarifazo más brutal de la historia, con la peor crisis económica, el aumento de la pobreza récord, las jubilaciones más bajas, con altas tasas de desempleo, el dólar y la inflación altísimos, sin heladera llena, y sin asado. Querían castigar a Mauricio Macri, y terminaron castigando a todo el país. Más de 12 millones de personas votaron para que pase esto que estamos sufriendo en estos momentos.
En el marco de los nuevos anuncios económicos, el secretario de Comercio Matías Tombolini anunció el relanzamiento del programa Precios Cuidados. El secretario defendió la iniciativa, aseguró que buscará “empoderar el programa” y explicó que será necesario establecer “precios de referencia” para los bienes en las góndolas.
El Gobierno informó que se convocará a empresarios y gremios a los efectos de asegurar un mecanismo que permita recuperar ingresos en trabajadores del sector privado, que incluye la mejora de las asignaciones familiares.
El Gobierno, a través de la ANSES, pagará un bono de refuerzo para jubilados, con el fin de morigerar los efectos de la inflación en el poder adquisitivo. El bono que pagará ANSES a jubilados se aplicará junto al aumento de las jubilaciones de septiembre.
Debido a la incertidumbre que transmite el desgobierno de Alberto Fernández, los ahorristas deciden retirar sus dólares de los bancos. En estos tres primeros días del mes de agosto el Banco Central ya perdió 150 millones de dólares, y solamente alcanza para pagarle a la mitad de los depositantes. Los encajes bancarios corren riesgo.
El crecimiento económico anunciado por Alberto Fernández sigue sin manifestarse en el poder adquisitivo. El INDEC anunció que el Índice de salarios subió un 6,2 por ciento en mayo de 2022, antes de que se desatara el estallido inflacionario y financiero tras la renuncia de Martín Guzmán. Contra una inflación mensual del 5,1 por ciento, en mayo los salarios lograron superar al crecimiento de los precios, pero la mejora real fue solamente de un punto.
El dólar blue vuelve a subir este miércoles y se acerca a los 300 pesos, en un día clave donde asumirá Sergio Massa al Ministerio de Economía y a la espera de nuevos mínimos
Afectados por los vaivenes de la economía nacional, la inseguridad cambiaria con las subas y bajas del dólar, y con un panorama internacional incierto debido a la invasión rusa a Ucrania, que repercute con fuerza en las condiciones de exportación agropecuarias y los precios de los combustibles, sumado a los cepos del gobierno de Alberto Fernández, el campo no tiene buenas expectativas para el 2023.
El dinero pasará automáticamente a ser caja de reservas líquidas en el Banco Central. Eso es lo fundamental del cambio de actitud del organismo financiero internacional, que, desde el miércoles pasado, modificó su consideración sobre la realidad del país.
El dólar blue baja por cuarta jornada consecutiva tras los cambios en el Gabinete, del que sobresale la llegada de Sergio Massa al frente del Ministerio de Economía, que englobará las áreas económica, productiva y agrícola.
Tanto el mercado financiero local como el internacional amplificaron la altísima volatilidad característica de las últimas semanas (meses en lo que respecta al internacional). Pero, en esta oportunidad no fue para mal, sino más bien para mostrar fuertes recuperaciones (donde las reacciones en el plano político y económico colaboraron, a diferencia de la semana anterior). No obstante, lejos está de haber sido resuelta la crisis cambiaria y financiera local.