La cuenta regresiva avanza y las reservas vuelan. Mientras el Banco Central se mantiene con los brazos atados por orden del ministro Luis Caputo, el gobierno de Javier Milei enfrenta el riesgo concreto de no cumplir con la primera gran meta pactada con el FMI: acumular 5.000 millones de dólares netos antes del 13 de junio.
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El indicador sintético de la actividad de la construcción (ISAC) se contrajo 4,1 por ciento respecto a febrero, indicó este jueves el INDEC. Pese a esto, a nivel interanual, presentó una mejora del 15,8 por ciento respecto a igual mes de 2024. El acumulado del primer trimestre sube 5,6 por ciento respecto a igual período del año pasado.
El modelo económico de Javier Milei muestra su rostro más crudo: en marzo, la industria manufacturera se desplomó un 4,5 por ciento mensual, registrando su peor caída desde la devaluación de diciembre de 2023.
El ministro de Economía y timbero recalcitrante Luis “Toto” Caputo ya ni se molesta en ocultar su afán por chuparse los ahorros en dólares de los argentinos y en medio de una reunión con empresarios, no solo llamó a invertir en la economía, sino que también le pidió a la población que empiece a quemar los ahorros “del colchón”.
El gobierno de Javier “Jamoncito” Milei sigue jugando con el futuro de los argentinos, y este jueves, aprobó un nuevo préstamo por 500 millones de dólares con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), formalizado a través del Decreto 313/2025.
La inflación siempre fue un mal endémico en la economía, erosionando de manera implacable el poder adquisitivo de su moneda. En las últimas dos décadas, este fenómeno devastó el valor del billete de 100 pesos, que en 2002 permitía adquirir 28 kilos de asado y hoy apenas alcanza para 8 gramos, según un informe del Instituto de Economía (INECO) de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE).
En una movida que promete sacudir los cimientos de la administración pública, el Ejecutivo nacional, bajo la dirección del ministro Federico Sturzenegger, lanzó este miércoles el mega desguace de la histórica Secretaría de Trabajo.
Desde que el Gobierno de Javier “Jamoncito” Milei asumió y decidió pasar la motosierra por organismos del Estado sin siquiera pararse a pensar dos minutos en las consecuencias de desguazar los mecanismos de control, hay sectores de la producción que se han visto sumergidos en una crisis alarmante.
En abril, los precios de los productos de la canasta básica registraron un aumento de hasta un 20 por ciento, según un relevamiento de la consultora Focus Market.
Echando por la borda las convicciones del “libre mercado” por las que tanto aboga el “Presiduende” Javier Milei, el ministro de Economía, Luis Caputo, se reunió este martes con representantes de las principales cadenas de supermercados del país en el Palacio de Hacienda con las intenciones de evitar más subas de precios en los productos.
La borracha Patricia Bullrich dispuso un aumento salarial para las fuerzas de seguridad que supera por mucho el mísero incremento que se les otorgó al resto de los trabajadores estatales.