El presidente de Estados Unidos, el demócrata Joe Biden, respeta al Tribunal Supremo del país y no cuestiona su legitimidad pese a la decisión de revocar la protección legal al aborto, que hoy mismo tildó de “terrible, dolorosa y devastadora”.
La menor, finalmente consiguió abortar en un hospital público del país, después de semanas de indecisión por la negativa de la abogada a autorizar el procedimiento, que está amparado por ley para este tipo de casos.