Las elecciones generales del 22 de octubre significaron un nuevo cimbronazo en el escenario político de la Argentina, que ya se había visto sacudida luego de las PASO. Contrario a lo acontecido en las primarias, cuando Javier Milei se impuso en un contexto de voto repartido en tres espacios, cuando nadie espera una suma tan abultada de votos a su favor, en esta ocasión Sergio Massa fue quien dio la sorpresa, al saltar del tercer puesto al primero, y con una importante diferencia sobre el segundo.