“Cristina tiene que estar presa, pero yo soy el Poder Ejecutivo”, resaltó. Y en una entrevista del 12 de diciembre de 2024, Milei sostuvo con contundencia: “A mí me parece que tiene que estar presa Cristina, pero yo soy el Poder Ejecutivo, eso lo tiene que resolver el Poder Judicial”.

Con esta frase, el mandatario dejó clara su postura sobre las responsabilidades de cada poder del Estado, al tiempo que cuestionó la instrumentalización política de los procesos judiciales durante administraciones anteriores.

Ratificación de la condena y reacción oficial

El 5 de junio de 2025, la Corte Suprema confirmó por unanimidad la condena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua por administración fraudulenta en la adjudicación de 51 contratos viales en Santa Cruz, dictada originalmente en 2022.

Al día siguiente, Milei recurrió a su cuenta en X para festejar el fallo con una escueta pero contundente consigna: “Justicia. Fin”.

Este mensaje, que retoma la fórmula popularizada por su vocero Manuel Adorni, fue acompañado de críticas veladas a sectores mediáticos que, según él, habían pretendido minimizar el avance de la causa.

Un país polarizado y la mirada puesta en la ejecución

La confirmación de la condena llega en un clima de fuerte polarización política y social, con marchas de apoyo y de rechazo a la exmandataria.

Sus defensores hablan de “lawfare” y apelarán a instancias internacionales, mientras el Tribunal Oral Federal 2, presidido por el juez Jorge Gorini, debe coordinar ahora la posible detención o el otorgamiento de prisión domiciliaria por razones de edad.

Con su pronunciación, Milei refuerza su discurso anticorrupción y su estilo directo, al mismo tiempo que marca con nitidez los límites institucionales: él impulsa, pero es la Justicia la que define.