“No sé si puedo cantar más. No tengo ganas, y para mí eso es una señal”, declaró. Harket, conocido mundialmente por éxitos como Take On Me, reveló que fue sometido a dos intervenciones quirúrgicas de estimulación cerebral profunda en 2024, una en cada hemisferio cerebral.

Según el biógrafo del grupo, Jan Omdahl, ambas cirugías fueron exitosas y lograron reducir drásticamente los síntomas físicos.

Sin embargo, el artista remarcó que el mayor desafío sigue siendo el equilibrio entre la medicación y los efectos secundarios, además del impacto emocional que provoca la incertidumbre sobre su futuro como cantante. “Aceptar el diagnóstico no fue difícil. Lo complicado fue encontrar la paz para poder seguir adelante”, confesó.

El tratamiento fue supervisado por la neuróloga Christina Sundal, exintegrante del equipo de Parkinson de la Mayo Clinic, y actual profesional del centro NeuroClinic Norway. Harket se suma así a la lista de celebridades que enfrentan el Parkinson, como Michael Fox y Ozzy Osbourne.

A-ha, formado en 1982, vendió millones de discos y marcó un antes y un después en la historia del pop con su debut Hunting High and Low. Hoy, mientras su legado musical sigue intacto, su voz, símbolo de una era, queda en suspenso frente a una enfermedad que no distingue ídolos.