Política
Se armó el tole-tole

Cuestión de peso: los "gordos" de la CGT se despertaron de la siesta y marchan contra Milei por el Día del Trabajador

Mientras los laburantes padecen la crisis generada por el Gobierno de Javier "Jamoncito" Milei, los jerarcas del sindicalismo decidieron convocar a una movilización para conmemorar el 1 de mayo. (Dibujo: NOVA)

En medio de los atropellos de Javier “Jamoncito” Milei a los laburantes, los “gordos” de la Confederación General del Trabajo (CGT) decidieron levantarse un rato de la siesta y convocaron a una movilización para este miércoles.

La convocatoria forma parte de las acciones por el Día del Trabajador, que se celebra este jueves 1 de mayo, en una muestra de rechazo a las "políticas de exclusión y ajuste" implementadas por el Gobierno. La central obrera busca alzar la voz en defensa de los derechos laborales y expresar su preocupación por la situación socioeconómica del país.

La concentración dará inicio a las 15.00 horas en la intersección de Independencia y Perú, desde donde los manifestantes marcharán hacia el Monumento al Trabajo en Av. Paseo Colón. La consigna principal de la jornada es "El trabajo es sagrado", reflejando la importancia fundamental que la CGT le otorga a la generación de empleo digno y la defensa de los derechos de los trabajadores.

En un comunicado, la CGT enfatizó la necesidad de "darle voz y fuerza al reclamo de los trabajadores y las trabajadoras" y reafirmó su compromiso con la defensa del trabajo. Expresaron su preocupación por el "sufrimiento de nuestro pueblo", haciendo referencia a la necesidad de asegurar una vida digna para los jubilados y un futuro con oportunidades para las nuevas generaciones.

Las demandas centrales de la movilización incluyen:

  • El cese de la represión ante la protesta social: La CGT exige respeto al derecho de manifestación y rechaza cualquier intento de silenciar las voces críticas.
  • El fin de los despidos: Se reclama el cese de los despidos tanto en el sector público como en el privado, buscando proteger la estabilidad laboral de los trabajadores.
  • Paritarias libres y homologadas: La central obrera defiende la autonomía de los sindicatos para negociar salarios justos y solicita la homologación de los acuerdos paritarios.

Rechazo en Diputados a la modificación del aporte sindical

Esta movilización coincide con un momento clave en el Congreso, donde las centrales obreras, tanto la CGT como la CTA, se oponen firmemente a los proyectos impulsados por bloques dialoguistas en la Cámara de Diputados que buscan eliminar el aporte obligatorio de empresarios y trabajadores a los gremios.

Representantes del triunvirato cegetista (Héctor Daer, Octavio Argüello y Carlos Acuña) y referentes de la CTA (Hugo Yasky y Ricardo Peidró) se harán presentes en la Comisión de Legislación del Trabajo para expresar su rechazo a esta iniciativa, argumentando que debilitaría financieramente a las organizaciones sindicales y, por consiguiente, su capacidad de defensa de los derechos laborales.

Tensión entre la CGT y el Gobierno

Esta movilización de la CGT se produce en un contexto de crecientes tensiones con el Gobierno Nacional. El paro del 10 de abril, si bien con diferentes interpretaciones sobre su impacto real, exacerbó las diferencias entre ambas partes. La CGT criticó duramente la "campaña publicitaria" que el gobierno realizó en contra de la medida de fuerza, calificándola como una práctica autoritaria.

En su comunicado, la CGT concluye citando al Papa Francisco: "Como dijo el Papa Francisco el trabajo es sagrado. Hagamos escuchar nuestra voz". La movilización del Día del Trabajador se presenta, por lo tanto, como una oportunidad para que la central obrera exprese su descontento y defienda los derechos de los trabajadores en un contexto económico y social desafiante.

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