El talente de los acontecimiento, de alguna u otra manera, lo dan los legisladores bonaerenses cuando se mencionan en la Cámara Bajo o Alta buscando defender intereses que contraponen estas ideas ya mencionadas.

En La Plata, el intendente Julio “Maquiavelo” Alak se pasea junto al referente del Movimiento Derecho al Futuro (MDF) en cada acto que tienen la oportunidad. Van a misa juntos, al Museo, realizan homenajes y se muestran fraternos como en el acto de apertura de la Autopista La Plata – Buenos Aires en la nueva bajada de 520.

Claro está que estas fricciones entre el kirchnerismo y los Kiciboys hacen temblar estructuras hacia abajo. Por un lado, los grupos que componen el espacio que respalda a Cristina Kirchner, no es solamente La Cámpora (LC), están convencidos que disputarán la próxima elección y ya asoman en la pelea legislativa provincial el presidente del PJ local, Ariel “te pusiste blanco” Archanco y Florencia “Muñeca de cera” Saintout, como cabezas de serie.

Este sector, ampliamente representado por la juventud, pretende reforzar su presencia en el Concejo Deliberante con la nueva camada política que lleva tiempo trabajando en los barrios de manera silenciosa y, seguramente, apostará en nutrir sus listas con una renovación de caras en base a las juventudes que vienen enarbolando el proyecto propuesto desde la aparición de Néstor Kirchner y Cristina Kirchner.

El que la tiene difícil es don Julio con la previa a lo que es este trasfondo electoral porque tiene que armar un rompecabezas entre los que pretenden renovar, los sindicalistas que piden lugares, los acuerdos políticos, con la necesidad imperiosa de tener concejales propios porque hasta el momento solamente el presidente del Concejo, Marcelo “el obediente” Galland, responde a su entorno.

Se rumorea que “El Turco” tiene compromisos ineludibles que cumplir con dirigentes a los cuales les ha dado su palabra. Por un lado, Alak le va a dar un respiro a un viejo dirigente que lo viene acompañando hace muchos años ofreciéndole el primer cargo a diputado provincial, no es otro que Carlos “pierde el pelo, pero no las mañas” Bonicatto y, por otro, a su nueva amiga política, Victoria “Ford A” Tolosa Paz, que pondría a su edecán, el ex concejal que levantaba la mano en favor de Julio "el investigado" Garro, quien resulta ser Javier “el faldero” García.

Los que tienen un futuro incierto dentro de la estructura alakista son tres sectores que hasta el momento tambalean, unos más que otros, entre desganos, reclamos de mayor protagonismo y de amistades incómodas.

Uno decididamente es el sector de una figura muy apagada, Gastón Castagneto, que supo encolumnarse políticamente a partir de su padre, legislador nacional kirchnerista, Carlos “el sin manos” y el apoyo denodado de su madre, Ana Arranz, recientemente fallecida y gerenciadora de su espacio político. Desaparecido en acción, no se lo ve participando y mucho menos mostrándose cerca de Julio Alak.

La otra funcionaria que viene con altos y bajos a raíz de su intención de querer ser protagonista y no le gustó cierta distancia dispensada por el propio Alak en las visitas a escuelas recuperadas es Paula “la lombriz” Lambertini.

La ex concejal supo ganarse su lugar en base a su pequeña construcción política, pero también mostrando su valía en discusiones políticas internas que le permitieron abrirse paso entre el dedo de los hombres. Hoy esa actitud es la que molesta logrando que el Ejecutivo la corriera de la escena y su futuro es incierto.

El tercer y último sector, es el que encabezan los hermanos Buera, Gabriel “la mentira” y Mariano “la sonrisa extrema” quienes tienen de punta de lanza a Guillermo “del mismo palo” Escudero, cuestionado por los incendios y basurales que la dirección de Medio Ambiente no atiendo.

Este grupo conformado en gran parte de dirigentes y militantes que no han tenido continuidad ni asidero en otros sectores busca instalarse regalando plantines en los semáforos y haciendo “la suya” queriendo coquetear con Julio Alak, que los detesta, y mucho menos los tiene en cuenta, aunque prefiere tenerlos adentro que jugando en su contra.

Esta interna que se vive en el PJ, como se dijo en un principio, dependen y mucho de lo que se decida en las altas esferas en un año movido, candente y que estará lleno de portazos porque las listas son cortas, los lugares pequeños y jugará el ingenio para poder estar para no caerse del plato.