Los dirigentes del PRO mantienen encuentros cada vez más asiduos con Sebastián Pareja y Lule Menem, los armadores que tiene Karina Milei y que escriben la letra chica de un acuerdo bonaerense, pese a la negativa del líder del partido amarillo, Mauricio Macri.

Cerca del ex Presidente creen que la elección de la Ciudad de Buenos Aires puede dejar al PRO en mejores condiciones de negociación y los cambios en el calendario electoral bonaerense ponen a Macri en una posición inmejorable a la negociación.

Además, el desdoblamiento electoral hace que las figuras seccionales que tiene el partido se ubican con mejor imagen que los principales dirigentes de La Libertad Avanza.

Pese a eso, la tríada de Ritondo, Santilli y Montenegro ponen el foco en afinar la lapicera y dejan trascender que el acuerdo “está cerrado” y apuestan a “ampliar la alianza” a otros sectores aliados contra el peronismo, como es el caso del radicalismo referenciado con Maximiliano Abad.

Karina Milei mira con buenos ojos la posibilidad de generar un armado con el modelo marplatense, donde el intendente (PRO) tiene dentro de su gabinete a dirigentes libertarios y del radicalismo. Eso se suma a la alta presencia de intendentes que tienen poder territorial por parte de la Unión Cívica Radical, algo que falta dentro de La Libertad Avanza.

La tríada del PRO que apela a un acuerdo que deje por fuera a Macri puso a disposición de la Mesa de articulación con La Libertad Avanza los 12 jefes comunales que ingresaron por ese espacio, además de las 22 bancas de la Legislatura, muchas de esas que vienen de la mano de Diego Santilli.

En contraposición a eso, Macri deja por momentos la campaña electoral de la Ciudad y recibe los dirigentes bonaerenses más cercanos, como el caso de Pablo Petrecca, el alcalde de Junín que se encarga del armado seccional y que tendrá un mano a mano con el kicillofismo, que se prepara y suma los jefes comunales del vecinalismo para dar una batalla para seguir con la lupa.

Con los cambios que oficializará la provincia en el calendario electoral, la negociación entre la tríada del PRO y los hombres que responden a Pareja dilatan la discusión hasta luego de la elección porteña el 18 de mayo.

Luego de eso, habrá poco más de dos meses para el cierre de alianzas y tres meses para el cierre de listas: 9 de julio será el reconocimiento de alianzas y el 8 de agosto la oficialización de las listas. Tres meses de rosca.