Rebeka Quaranta rompe barreras y desafía estereotipos desde la pasarela: "La belleza es nuestra luz"



Rebeka Quaranta tiene 25 años, es de la Zona Norte de Buenos Aires, y mientras estudia Instrumentación Quirúrgica se desempeña también como modelo. En diálogo con NOVA, nos abrió las puertas de su pasado y nos contó sobre sus experiencias en el mundo de las pasarelas y los flashes.
“Mi inicio en el modelaje fue un gran cambio”, recordó, y sostuvo que sus primeros pasos en la profesión estuvieron relacionados con el miedo a los estereotipos sobre los cuerpos y los parámetros de belleza hegemónica: “Pensaba que por ser ‘gorda’ o ‘grandota’, como algunos me decían, no iba hacer aceptada en este mundo tan maravilloso”, reveló.
Sin embargo, pudo superar estas dudas y prejuicios, para lanzarse hacia adelante y cumplir con sus deseos: “Me costó hasta que entendí que si lo podía imaginar, ¿por qué no podría hacerlo realidad y romper con todo estereotipo que maneja la sociedad?”, reflexionó.
En ese sentido, remarcó: “Lo que más me gusta de mi profesión es dar ese mensaje a todos, sean mujeres u hombres; que no importa si son gordos o flacos, también son perfectos y que también puedes ser grandes modelos profesionales el día de mañana. La belleza es nuestra luz”.
Al mismo tiempo que remarca que tuvo la grata experiencia de conocer y trabajar con grandes diseñadores y fotógrafos de distintas zonas de Buenos Aires, Rebeka aclara que ella no ha tenido un referente en el mundo de modelaje, pero que sus recuerdos de la infancia y el apoyo de su madre fueron fundamentales para el desarrollo de su carrera.
Su interés en la profesión no se limita a su propio rol como modelo, sino que también le gustaría a futuro incursionar en el camino de la representación y la enseñanza: “Me gustaría tener mi propia agencia de modelos ‘curvis’ y hacer sentir a cada mujer u hombre que pueden llegar a ser grandes profesionales, que el miedo solo está en la mente”, reveló.
Detrás de las cámaras
Por fuera del mundo de los flashes y las pasarelas, Rebeka es una mujer que está también desarrollando su formación académica, cursando los primeros años de Instrumentación Quirúrgica.
Su pasatiempo es visitar a su familia y disfrutar de la compañía de sus seres queridos. También nos contó que su entrenamiento favorito es salir a correr: “Me hace conectar con la tierra”, afirmó.
Por último, nos dejó una última reflexión para compartir con el público de NOVA: “Dejemos de hablar del cuerpo de los demás, cada uno sabe lo que tiene que trabajar en sí mismo para sentirse mejor. Tener celulitis, estrías o panza es normal, somos humanos, no somos perfectos. Pero si podés cambiar algo no te gusta de vos, y decidís cambiarlo, hacelo porque lo sientas vos, no por que otro te obligue”.