Desde entonces, el legislador porteño ha optado por un perfil bajo y pasa la mayor parte del tiempo en su oficina de Bull Market, la agencia de bolsa que fundó junto a su familia y que todavía dirige.

Allí, lejos de la exposición mediática, revisa encuestas y monitorea su imagen en la ciudad de Buenos Aires, intentando definir su futuro político tras ser apartado del oficialismo.

La relación entre Marra y Karina Milei siempre estuvo marcada por la tensión. El bróker intentó en su momento quedar al frente del armado libertario a nivel nacional, una tarea que estaba bajo el control de la actual secretaria general de la Presidencia junto a sus entonces colaboradores, Carlos “Chino” Kikuchi y Julio Serna. Su desplazamiento de ese rol sembró un conflicto que terminó por estallar con su expulsión del partido.

La decisión de apartarlo de La Libertad Avanza estuvo acompañada de mensajes sugerentes. En la cuenta de X atribuida a Santiago Caputo, asesor presidencial y viejo conocido de Marra, apareció un críptico mensaje poco antes de que se oficializara la medida: “Ejecuten orden 66”, en referencia a la traición y eliminación de los Jedi en la saga Star Wars.

A pesar de haber sido desplazado, Marra todavía sostiene que podría competir en las elecciones legislativas porteñas con una lista propia, convencido de que su imagen sigue siendo fuerte en la ciudad. Sin embargo, su futuro político parece cada vez más incierto.

Su salida del oficialismo evidencia el poder absoluto que Karina Milei ejerce sobre el espacio libertario y deja en claro que, para quien no se alinea a sus decisiones, no hay lugar en La Libertad Avanza.