Una nueva instancia democrática clave a nivel institucional y político se abre este nuevo año en el país, en el que por primera vez se implementará la Boleta Única Papel reglamentada por decreto, en el marco de las elecciones legislativas que ya comienzan a quitarle el sueño a unos cuantos exponentes de la “casta política”.
Este 2025 se renovará la mitad de los diputados (127 bancas) y un tercio del Senado (24 bancas). Mientras tanto, el Ejecutivo sigue insistiendo en la eliminación de las PASO del 3 de agosto por cuestiones presupuestarias, antesala de las generales del 26 de octubre que determinarán los nuevos senadores y diputados nacionales que calentarán sillas en el Congreso.
“Desde 2011, fecha en que entraron en vigencia, solo han sido un costo económico para el Estado y una molestia para el conjunto de los ciudadanos, que han tenido que votar en Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias para resolver los problemas que los políticos no han sabido solucionar en sus propios partidos”, argumentó el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, en la red social X.
Lejos de vislumbrarse un escenario ordenado para LLA, ya hay cinco jurisdicciones que decidieron desplegar su autonomía y desdoblar los comicios locales: Santa Fe (29 junio), Salta (4 mayo), Chaco (11 mayo), San Luis (11 mayo) y Ciudad de Buenos Aires (6 julio).
Una de las provincias que siguen en veremos es, por supuesto, Buenos Aires, la gallina de los huevos de oro que engloba a 135 municipios, varios de ellos con un importante peso electoral, que no quiere dejar librados al manejo de los libertarios.
El gobernador Axel Kicillof, enfrentado con la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, aún está meditando estrategias que le permitan llevar agua para su molino, sin que esta enemistad le implique un cimbronazo para su futuro más palpable, en un momento histórico que encuentra al peronismo herido de muerte. CFK lógicamente no quiere desdoblar, y ahí está la encrucijada. Dar un paso en falso podría tener un alto costo político para el mandatario bonaerense, por lo cual camina con prudencia esperando definiciones del Congreso sobre la continuidad de las PASO antes de actuar apresuradamente y quedar empantanado.
Por su parte, el presidente Javier Milei sigue jugando al tira y afloje con el líder del PRO, Mauricio Macri, con quien tiene una relación tensa y ambivalente (por más que lo niegue), que lo lleva a twittear mensajes invitando a la reflexión “a los supuestamente no kirchneristas que están del lado de las ideas de la libertad, pero de repente les agarra un ataque de republicanismo ñoño propio de criaturas".
Al respecto, sobre la chance de una alianza entre La Libertad Avanza y el PRO de cara a las legislativas, Milei deslizó la idea de absorber el partido amarillo: "Él sabe que yo tengo siempre las puertas abiertas [...] Él no está solo", señaló, marcándole la cancha sobre quién maneja los hilos del poder, y quién elige -o no- sumarse a las reglas de la selva del Rey León.
De todos modos, en política no hay que perder de vista la relatividad. El PRO es un partido con estructura en todo el territorio nacional, mientras que La Libertad Avanza sigue evidenciando zonas desiertas y baches que le pueden llegar a complicar el terreno en una elección crucial para el futuro del oficialismo.
La rosca recién empieza… habrá que ver si el espacio comandado por "Jamoncito" tiene suficiente aguante o se queda a mitad de camino.