Su bajo perfil le permite desenvolverse en los más variados ámbitos y sentarse en las más diversas mesas políticas. Cuenta con la confianza de hombres de primer nivel y con la información de mucho de lo que pasa en la política a nivel nacional, provincial y municipal.

Sus análisis y comentarios son sesudos, interesantes y jugosos, a veces insólitos, pero seguramente atraparán el interés de los lectores de NOVA.

-Pleno enero estimado Enmascarado y al parecer se rompió el “impasse” de la primera quincena entre el camporismo y el gobernador Axel Kicillof…

-Así parece; en este caso, para variar, fue Andrés “Cuervo” Larroque, el ministro de Desarollo para la Comunidad, el que rompió el silencio, nunca sabemos si por cuenta propia o por órdenes de calle 6, aunque la respuesta es imaginable. Como habrá leído, salió a dar un reportaje en una revista de tirada bonaerense y, aunque sin nombrar a nadie explícitamente, acusó por elevación a los legisladores de La Cámpora de “no colaborar” con el presupuesto de Axel Kicillof…

-Claro, y del otro lado, siempre en “off”, salieron a contestarle…

-Fiel al estilo de la “Orga”. Los soldados de Máximo Kirchner tildaron de innecesaria la bravuconada del funcionario kicillofista y cofundador de la agrupación que comanda el hijo de Cristina Fernández de Kirchner y se atajaron diciendo que los legisladores bonaerenses prestan colaboración al Gobernador tanto en Diputados como en el Senado. Como dijo un camportista de paladar negro, “Guerra Fría en pleno verano”. Yo diría, “fría tirando a tibia”.

En algo tienen razón: el peronismo no se puede dar el lujo, como hemos explicado hasta el hartazgo, de seguir como un hormiguero pateado ante un gobierno nacional que, aunque no les guste a muchos, sigue con una imagen positiva de más del 50 por ciento. Hablamos puntualmente de Javier Milei y los funcionarios que mejor miden, como Manuel Adorni o Patricia Bullrich.

-Entendible, claro. Tienen el consuelo de que en Provincia la oposición también perdió la brújula, algo parecido a lo que pasa en el escenario nacional.

-Es un atenuante, sí, pero no alcanza. Como sea, según información que me ha llegado la idea del Kicillof es arreglar de una vez por todas con Cristina y sentar en esa mesa a Sergio Massa para que la sangre no llegue al río. “Es muy enero”, oigo decir, pero los días pasan y los motores se van calentando.

Para colmo, la falta de definiciones sobre el proceso electoral no hace más que embarrar la cancha y la decisión ahí la tiene Kicillof, porque el rompecabezas político de UP está desordenado.

Preguntas que surgen y condicionan decisiones: ¿Habrá primarias?, ¿El gobernador se animará a desdoblar la elección bonaerense y tendrá el coraje de fijar un calendario propio? Todos interrogantes que, de algún modo u otro, van a tener que empezar a responderse, porque como dice el refrán, “Divide y reinarás”.

-Impecable como siempre estimado Enmascarado, nos vemos en el próximo encuentro. Un placer.

-El placer es mutuo, hasta pronto.