Las metas no alcanzadas y los desafíos pendientes suelen derivar en frustración y autocrítica, creando un estado de tensión que impacta directamente en la salud.

Señales de alarma

"La fatiga mental y física es una señal de alarma que no debe minimizarse. Aparecen síntomas como irritabilidad, pérdida de energía, insomnio, dolores musculares, dificultades digestivas y falta de concentración", explica la Lic. Liliana Acuña, psicóloga de Boreal Salud.

La especialista advierte que cuando la persona se exige sin pausas ni descanso, el cuerpo comienza a manifestar lo que la mente no logra procesar. La combinación de demandas laborales, compromisos sociales y pensamientos autocríticos puede derivar en un desgaste progresivo.

Estrategias de prevención

Para preservar el bienestar emocional y prevenir el burnout, los especialistas recomiendan implementar acciones cotidianas que ayuden a recuperar el equilibrio. Entre las principales estrategias se encuentran:

• Incorporar prácticas de relajación o respiración consciente
• Organizar prioridades y distribuir mejor las tareas
• Reservar momentos para actividades placenteras
• Establecer límites saludables a los compromisos
• Fomentar vínculos positivos y redes de contención
• Reemplazar pensamientos rígidos por otros más realistas
• Mantener rutinas saludables de descanso, ejercicio y alimentación
• Cultivar la amabilidad hacia uno mismo

Desde Boreal Salud destacan que la psicoterapia ofrece recursos concretos para gestionar el estrés y recuperar la motivación, ayudando a establecer objetivos realistas y desarrollar estrategias de afrontamiento saludables.