Después de la amarga eliminación en la Copa Libertadores, Vélez Sarsfield regresó a la Liga Profesional este lunes por la 10ª fecha del Torneo Clausura con varias bajas en el plantel, pero logró un valioso triunfo 3-1 sobre Atlético Tucumán en el José Amalfitani.
El Fortín, dirigido por Gustavo Quinteros, mostró un dominio claro desde el pitazo inicial, presionando alto y generando chances en el área rival. Sin embargo, un error garrafal de Lisandro Magallán a los 20 minutos permitió que Mateo Bajamich aproveche un rebote y abra el marcador para los tucumanos, desatando un momento de titubeo en la defensa local que complicó el trámite del primer tiempo.
Antes del descanso, Vélez reaccionó con fuerza y empató el partido gracias al regreso al once titular de Braian Romero, quien se enchufó de inmediato. El delantero, ausente en los últimos encuentros por lesión, facturó un doblete en apenas siete minutos: primero con un cabezazo preciso tras un centro milimétrico, y luego definiendo con frialdad un contraataque letal.
Estos goles no solo nivelaron las acciones, sino que inyectaron confianza al equipo, que salió del vestuario con mayor convicción y control del balón, neutralizando los intentos de reacción del Decano.
En el cierre del encuentro, Diego Valdés selló la victoria con su primer gol desde su arribo al club, un remate esquinado que desató la fiesta en el Amalfitani y puso cifras definitivas al 3-1.
Con este resultado, Vélez suma 17 puntos y se mantiene a un solo punto de Deportivo Riestra, líder del Grupo B y próximo rival en la fecha 11, lo que promete un duelo clave por la cima. Atlético Tucumán, por su parte, se hunde en la tabla con apenas 8 unidades, complicando su lucha por no descender. El Fortín, pese a las ausencias, demuestra resiliencia y apunta firme a la fase final del certamen.
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