En un capítulo más del sainete oficialista, José Luis Espert, el diputado envuelto en sombras de narcotráfico, salió al cruce de los rumores tras reunirse con Javier Milei en Olivos: "No me bajo nada", proclamó el "Profe" liberal, aferrándose a su candidatura por La Libertad Avanza (LLA) en Buenos Aires.
Pero el daño está hecho. A tres semanas de las legislativas del 26-O, este "apoyo" forzado de Milei no borra las transferencias por 200 mil dólares de Fred Machado, el narco detenido en EEUU, que financiaron su campaña de 2019 con aviones de la mafia.
Hola Edu!
— José Luis Espert (@jlespert) October 4, 2025
No me bajo nada.
Te veo el lunes en tu programa de A24.
Salute! https://t.co/2UFq3esrvg
¿Declarado? Claro, como si eso lavara el hedor. La reunión en Olivos fue un salvavidas improvisado.
Milei, respaldando a su delfín, tildó las denuncias de "operación kirchnerista", mientras Karina Milei y el PRO presionaban en las sombras para bajarlo. V
oceros como Adorni se lavan las manos: "Que se explique él". Pero el Congreso hierve: Grabois exige juicio, y medios internaciones ya lo bautizaron "el candidato narco de Milei".
En las elecciones bonaerenses, Axel Kicillof les dio una paliza; ahora, con Espert tambaleando, el Presupuesto 2026 se complica más, entre recortes que asfixian al pueblo y un FMI que aprieta.
Este "no me bajo" es puro maquillaje. Milei prometió motosierra contra la casta, pero protege a un figurín con olor a lavado mientras la inflación devora salarios que no suben.
¿Sobrevivirá LLA sin credibilidad? El 26-O, los bonaerenses castigarán este régimen de hipocresía y desmanejo que solo enriquece a los suyos.
El verdadero escándalo no es la reunión ni negar lo obvio, sino un gobierno que finge pureza mientras se ahoga en su propia ciénaga.
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