El contraataque de Ucrania

Según el presidente ucraniano Volodimir Zelenski, una semana después del inicio de la operación, Ucrania controla 74 localidades en la región fronteriza de Kursk. A pesar de los intensos combates, las fuerzas ucranianas continúan avanzando, demostrando una determinación inquebrantable en su lucha contra la invasión rusa.

El comandante de las Fuerzas Armadas Ucranianas, Oleksander Sirski, informó que entre 6.000 y 15.000 soldados ucranianos han ocupado alrededor de 1.000 kilómetros cuadrados de territorio. Esta información fue inicialmente divulgada por fuentes rusas, mientras que el gobierno ucraniano mantuvo inicialmente una postura más reservada sobre la operación. Este movimiento representa un cambio estratégico significativo por parte de Ucrania.

El objetivo parece ser alterar la tendencia que, desde hace más de un año, muestra un control de la situación por parte de Rusia. Aunque Vladimir Putin no ha logrado grandes éxitos, como la toma completa de la región del Donbas, Ucrania busca cambiar el equilibrio de fuerzas en el campo de batalla.

La decisión de Zelenski de acelerar las operaciones militares podría estar motivada por factores políticos internacionales. Con la posibilidad de que Donald Trump gane las próximas elecciones estadounidenses y cumpla su promesa de poner fin a la guerra, Ucrania busca ganar territorio rápidamente para negociar desde una posición de mayor fortaleza en caso de un eventual cese al fuego.

La reacción Rusa

La respuesta de Rusia ante esta ofensiva fue inmediata y contundente. El presidente Vladimir Putin condenó la acción ucraniana, calificándola como una "provocación sin precedentes" y prometió tomar todas las medidas necesarias para proteger la integridad territorial de Rusia. El Kremlin ha dejado claro que el ejército ruso está preparado para responder de manera decisiva a cualquier amenaza en sus fronteras.

Como parte de su respuesta, Rusia ha ordenado la evacuación masiva de civiles de las zonas afectadas por los combates. Las autoridades rusas informaron que más de 20,000 personas han sido trasladadas a lugares más seguros dentro del país, priorizando el bienestar de sus ciudadanos en medio de esta crisis.

Kiev y el mundo esperan una dura acción de represalia rusa: no es común desafiar de esa forma a Putin, líder de una potencia nuclear. Se teme que el gobierno ruso ataque a Kiev. Según la prensa internacional, Putin está nervioso y preocupado: “El enemigo seguro que recibirá la respuesta que merece, y todos nuestros objetivos, sin duda, serán conseguidos”, dijo.

Los planes de Zelenski

Este cambio en el conflicto y la decisión de Zelenski de atacar por primera vez territorio ruso hay que relacionarlo con la autorización que recibió el gobierno de Ucrania de parte de sus socios occidentales para poder usar el armamento entregado por en territorio ruso. Testimonios indican que se vieron en la zona de operaciones a los cazas F-16 recientemente entregados por países de la OTAN.

Por eso Putin está enfurecido con los aliados de Zelenski. Dijo que "Occidente nos combate con las manos de los ucranianos". La administración Joseph Biden dijo la semana pasada que no estaba al tanto de los planes de Kiev con antelación, pero reiteró su apoyo a Ucrania.

John Kirby, asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, dijo: "No se equivoquen: esta es la guerra de Putin contra Rusia. Y si no le gusta, si le incomoda un poco, entonces hay una solución fácil: que se largue de Ucrania y ya está". Por su parte la Unión Europea, Alemania, el Reino Unido y otros países occidentales expresaron su apoyo a Ucrania. Es la primera vez en más de una década, cuando Rusia desencadenó el conflicto anexionando Crimea en 2014, que la guerra afecta directamente a los rusos.