Qué es la criopreservación de óvulos: quiénes y cuándo pueden hacerla
Por la doctora Fiamma Di Biase (*)
Con el devenir de los años, los proyectos de crecimiento laboral, la independencia y autonomía femenina ha determinado que las mujeres posterguemos el proyecto de ser mamás siendo luego de los 35 años, en algunos casos, más difícil. Esto podría deberse en parte a que la reserva ovárica, es decir la cantidad de óvulos que tenemos de cara a la menopausia, lógicamente sean menos y de menor calidad.
Entonces es ahí cuando muchas nos preguntamos: ¿qué puedo hacer para asegurar mi futuro reproductivo? Primero, saber que no existen estrategias para mantener la cantidad y calidad de nuestros óvulos con el paso de los años, pero si podemos guardar nuestros óvulos para utilizarlos más adelante. De esta forma, aseguramos la cantidad y calidad de nuestra edad actual, por lo que siempre recomendamos hacerlo cuanto antes este proyecto se presente en la vida de las mujeres, cuando decidimos conscientemente postergar nuestra maternidad y definimos un proyecto de planificación familiar.
Una vez que nos decidimos a consultar sobre esta opción es importante conocer algunos aspectos. En principio nuestra edad, antecedentes patológicos, quirúrgicos, ginecológicos, índice de masa corporal, hábitos y reserva ovárica. Necesitamos ver de esta manera cómo funcionan los ovarios a través de un perfil hormonal, la hormona antimulleriana y una ecografía que nos informará cuántos folículos hay presentes en el ovario, dado que dentro de ellos están los óvulos. Esto va a definir la factibilidad del tratamiento y cuál es el mejor esquema de medicación para vos.
El tratamiento para congelar óvulos lo denominamos criopreservación. El mismo consiste en aplicar medicación hormonal para estimular los ovarios y aumentar la cantidad de óvulos maduros disponibles para la recolección. Esto se realiza a través de inyecciones diarias durante aproximadamente 10-12 días, con el objetivo de aumentar el número de óvulos a obtener para el día de mañana fertilizar y con ello lograr embriones y la posibilidad de conseguir un embarazo.
Durante el tratamiento se realizan controles ecográficos para evaluar el crecimiento folicular y así, de los óvulos. No es un procedimiento dificultoso, la recolección de los ovocitos se realiza en quirófano mediante ecografía y vamos a recomendarte ciertos cuidados para que el procedimiento sea lo más seguro posible y optimizar tu recuperación.
(*) Coordinadora del Departamento de Medicina Reproductiva de Precisión (IA) de Cegyr.
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