Martín Vestiga
Una producción de NOVA

Martín Vestiga, Tito Rosca y la periodista albertista caprichosa por los privilegios

Tito Rosca y Martín Vestiga, siempre vigentes. (Dibujo: NOVA)

Sagaz como siempre. Intrépido e inquisidor. Adjetivos que sólo califican a Martín Vestiga, un asiduo colaborador de NOVA que vive trabajando y que, en sus ratos libres, investiga como pocos. Todo un adicto a su profesión.

Martín Vestiga se encontraba tomando uno de sus tantos cafés en la hermosa Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA). Cuando de pronto... El satánico Tito Rosca ingresó por la puerta: "¡Aquí está como siempre mi fiel amigo!".

Pobre Martín Vestiga, se tomó la cabeza como si fuera una pesadilla...

- ¿"Tincho" cómo va? Tengo algo para contarte en "off". Capaz te sirve - Tito Rosca con una sonrisa fue al grano.

- Muy bien... - Martín Vestiga dejó el café a un costado.

- ¿Viste que Luciana Rubinska se fue hace poco de C5N? - "Tincho" asintió con la cabeza, mientras recalcó que "se trata de la amante de Alberto Fernández". - Va por ahí. Te cuento lo que me filtraron desde adentro...

- Otra vez noticia la periodista preferida del ex Presidente.

- Al poco tiempo que Alberto asumió como Presidente, ella empezó a "tener más banca" dentro del canal. Y usaba ese poder... - Frenó Tito Rosca para prenderse otro cigarrillo dentro del café. - Se quejaba por cualquier cosa. Onda diva. Y al momento de no gustarle algo, se quejaba con los capos del canal, y estos le tenían que dar "bolilla" a sus caprichos.

- Terrible... También tenía humos de diva cuando encontró lugar en el canal de deportes ESPN.

- La cuestión es que cuando se fue Alberto de la Presidencia, ella perdió esos privilegios. - Contó entre risas Tito Rosca.

- Es entendible.

- Y entre eso, y no ponerse de acuerdo con la empresa en términos económicos, se fue a Telefe. Porque le conviene por plata. - Sin saludar, Tito Rosca se prendió otro cigarrillo y se alejó sin más...

Y todos me miran, me miran, me miran...

Porque sé que soy linda, porque todos me admiran.

Y todos me miran, me miran, me miran...

Porque hago lo que pocos se atreverán.

Y todos me miran, me miran, me miran...

Algunos con envidia pero al final, pero al final...

Pero al final, todos me amarán.

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