Gracias al tenis, la deportista pudo conocer varios lugares del mundo, entre ellos Suiza, país del que se enamoró y decidió hacerlo su nuevo hogar. Son muchos los años que lleva erradicada allí, siendo que la Argentina terminó quedando en el olvido, y con más razón con los recientes hechos.

“Gaby tiene una casa en Zurich, otra en Miami, un departamento en Buenos Aires y va alternando. Además, todavía tiene contratos, tiene muchos contratos”, aseguraba el periodista Chiche Almozny, dejando en claro que nuestro país dejó de ser su hogar.

Y es que, luego del fallecimiento de la madre de Gabriela, Beatriz Garofalo Sabatini, todo aquello que la unía al país se esfumó. Además, el vínculo con su hermano Ova Sabatini y su cuñada, Catherine Fulop, terminó de empeorar tras la pérdida de Betty y el intento por repartir la herencia.

Según lo que aseguraron muchas fuentes, la ex tenista habría hallado varias irregularidades con los bienes de su madre, además de unas joyas que ella regaló y que terminaron en propiedad de Catherine, cosa que terminó por romper todo vínculo, logrando así su ausencia al casamiento de Oriana.

Es preciso mencionar que Gabriela Sabatini siempre ha tenido un perfil muy discreto en cuanto a las cámaras, por lo que suele ser muy raro que brinde entrevistas. Sobre esto, hace un tiempo, habló de lo que le sucede cada vez que se evidencia ante mucha gente.

“La realidad es que a mí no me gusta hacer entrevistas. No va mucho con mi personalidad, me cuenta mucho cuando hay un tumulto de gente. Me agarra como fobia, tuve que trabajar mucho con eso”, expresaba Sabatini.