La nueva vertiente del radicalismo que responde a Miryam Prunotto está integrada por el legislador provincial Dante Rossi, el ex intendente de Río Cuarto, Juan Jure, y el dirigente Polo Gait.

La realidad es que nada indica que los radicales puedan conseguir una lista unificada y evitar la interna. Públicamente la mayoría expresa estar seguro que el camino es no hacer alianzas con los libertarios aunque Rodrigo de Loredo apoya a Marcos Ferrer, intendente de Río Tercero.

Por su parte desde el entorno de Prunotto reconocieron que “hay gente del espacio de ella ahí” y apuntaron a Gait.

Sin embargo ese espacio radical también está quebrado "Hay algunos que estamos en esa foto que no vamos a permitir ningún tipo de injerencia del PJ”, dijo uno de los radicales en referencia a una foto pública de una reunión realizada en las oficinas del poder legislativo provincial.

La realidad es que cada una de las facciones rojas cruzan sus caminos e intenciones y demuestran lo alterado que está el partido, por ejemplo, algunos tienen cierta expectativa de cerrar con Mestre, quien a esta altura fue tentado con una silla entre los delegados nacionales y el comité capital, alternativas que crispan al resto de los socios de Ferrer.

“La UCR de Córdoba debe expresar su rechazo a cualquier alianza con la Libertad Avanza y defender sus principios y valores y comprometerse a llevar a un radical de candidato a gobernador”, expresaron Rossi, Jure y Gait claramente en sintonía con la bajada de línea del panal por la influencia de la vice gobernadora.

Obviamente esa influencia peronista que salpica de lleno a varios radicales es algo que en el clima interno ya nadie soporta como antes.

Son varias las voces que creen que el tiempo de diversidad política del cordobesismo, y el poder de captación de Martín Llaryora y su comprobado éxito del pasado está en declive.

El clima de interna se puso más tenso todavía cuando Federico Zárate, intendente radical de Jesús María expresó públicamente cuando le preguntaron si se sumaría al cordobecismo "no descarto nunca nada, soy sincero. Si considero que hay un proyecto bueno, pensado en la gente y que se puede trabajar de manera seria, lo voy a hacer con los que tenga mayores coincidencias. Sé que me va a traer problemas decir esto".

Y para ponerle más leña al fuego sentenció" a esta altura del partido, venir a querer jugar dos semanas antes de cerrar una lista… no juego para nadie. Juego para sostener a Jesús María y lo que le sirva al departamento Colón. No escuché propuestas de Marcos (Ferrer), ni de Ramón (Mestre) ".

Este fin de semana nadie descansará en el radicalismo, arden los teléfonos y la próxima semana deberán definir si votan entre dos o tres alianzas o llegan al milagro de una lista unificada evitando la elección interna.