Sin embargo, Sergio Massa sigue manteniendo el enojo dentro del espacio que lo nuclea y avisa que el Frente Renovador es un espacio por sí mismo y que el 2025 puede encontrarlo fuera de la alianza que hoy mantiene con el peronismo y La Cámpora.

El principal problema que tiene Massa hoy es la contención de sus líneas intermedias que, lejos de las mieles del gobierno provincial y afuera del nacional, no pueden sostener la estructura que montaron en los últimos años.

Los ánimos se calmaron cuando Ramón Arteaga, referente platense del Frente Renovador asumió como Presidente de AUBASA, sin embargo, sólo logró su cargo y no tiene ninguna de las direcciones bajo su mando. “No le dejaron poner ni el de Legal y Técnica, que es quién le cuida la firma. No sabe lo que compra”, le dijo a NOVA muy ofuscado un hombre del massismo bonaerense.

Según pudo saber NOVA, Pablo Ceriani, hombre fuerte de Axel Kicillof en AUBASA y designado como Gerente General, superpobló con todos directivos ex Aerolíneas Argentinas y dejó sin espacio a Arteaga y Walter Abarca, lo que generó un cortocircuito entre Massa y el gobernador Kicillof.

En las próximas semanas, Massa oficializará a Juan Andreotti como la cara provincial del Frente Renovador y se prepara para un debate que, puertas adentro, trae algunas discusiones fuertes y se trata de la reforma de la reelección indefinida.

En caso de avanzar lo que parece inevitable, Nicolás Russo y Rubén Eslaiman, dos de los hombres fuertes de Massa en la Cámara de Diputados deberán dirimir su futuro en la votación sobre acompañar (o no) la norma que limita la reelección indefinida. Si esto no avanza, Massa pierde dos de sus alfiles más importantes en la Legislatura.

Consultada por NOVA, Malena fue contundente para determinar el futuro de la votación. “Cada uno tiene libertad de votar lo que quiera, nosotros no lo condicionamos”, dijo ante la postura del espacio, aunque agregó: “El que vota positivo, es porque no entendió nada”.