
Por Gustavo Zandonadi, especial para NOVA
El 10 de julio de 1866 nacía una institución llamada a ser decisiva en el rumbo de la historia de nuestro país: la Sociedad Rural Argentina. Esta entidad tuvo un rol protagónico en el derrotero nacional desde hace 158 años. Entre los socios que firmaron el acta fundacional se encuentran: Claudio F. Stegmann; Eduardo Olivera; Eustaquio J. Torres Agüero; Francisco B. Madero; Jorge R. Stegmann; Jorge Temperley; José Toribio Martínez de Hoz; Juan Nepomuceno Fernández; Leonardo Pereyra; Lorenzo F. Agüero; Luis Amadeo; Mariano Casares; Ramón Vitón; Ricardo Black Newton y Guillermo R. Garrahan.
Orígenes y fundadores
La actividad ganadera se dió en el Río de la Plata como algo natural. Los colonizadores españoles probablemente no imaginaron que sus bovinos serían el motor de la principal actividad económica en el futuro. La pampa húmeda se convirtió en el terreno ideal para criar y exportar carne y cueros al mundo. Los hijos y nietos de los adelantados españoles hicieron fortuna gracias al producto de la tierra.
En este contexto, la Sociedad Rural Argentina nació como una organización defensora de los intereses oligárquicos. Sus fundadores dieron forma a una entidad que tuvo fuerza para hacer oír su visión sobre el modelo económico adoptado por el elenco gobernante, conservador en lo político y liberal en lo económico. Desde entonces, la Sociedad Rural ha mantenido su influencia, incluso en los momentos más convulsos de la historia argentina.
La Sociedad Rural no solo representó los intereses del campo, sino que también moldeó la agenda política. Bajo el gobierno de Roca la institución fue beneficiada presente en el reparto de tierras ganadas a los indios en la Conquista del Desierto y bajos impuestos.
Vínculos con los Golpes de Estado
La Sociedad Rural Argentina es una entidad golpista por naturaleza. Apoyó fervientemente los golpes de Estado que marcaron la historia argentina. Durante el golpe militar de 1930, la entidad apoyó activamente a José Félix Uriburu, quien derrocó al presidente Yrigoyen. En 1955, durante el derrocamiento de Juan Domingo Perón, respaldó la Revolución Libertadora. Lo mismo ocurrió en 1966, con la Revolución Argentina, que expulsó a Arturo Illia y en 1976, con el Proceso de Reorganización Nacional, que derrocó a Isabel Perón.
El Conflicto con el campo
Durante los años de gobierno kirchnerista, la Sociedad Rural Argentina se enfrentó a uno de los mayores desafíos de su historia: el conflicto con el Poder Ejecutivo por la Resolución 125. Las retenciones a las exportaciones agropecuarias generaron tensiones y movilizaciones en todo el país entre marzo y julio de 2008. Sin embargo, la entidad no cedió terreno y defendió con firmeza los intereses del sector. El gobierno de Cristina Kirchner intentó aprobar la norma a través de una ley del Congreso, pero la votación en el Senado terminó igualada y el vicepresidente Julio Cobos votó contra el proyecto de su gobierno, poniendo fin al conflicto y rompiendo la relación con la Presidente para siempre. La Sociedad Rural Argentina lo vivió como un triunfo.
El Macrismo y la Sociedad Rural
Con el arribo al poder del macrismo, la Sociedad Rural Argentina estuvo representada en el gobierno a través de Luis Miguel Etchevehere, que se convertió en ministro de Agricultura. Este nombramiento confirmó que la influencia de la entidad en la política nacional estaba intacta.
Hoy en día la Sociedad Rural Argentina sigue siendo un actor relevante en la vida política del país. En la actualidad se enfrenta desafíos en un mundo cambiante. La agricultura sustentable, la tecnología y la equidad son temas que la entidad debe abordar de cara al siglo XXI.