A su llegada, los Reyes se han dirigido a la tribuna, que estaba colocada justo delante de la puerta principal del Palacio Real. Doña Letizia se ha decantado por una chaqueta de grandes cuadros negros de Uterqüe, la extinta marca de Inditex, pantalones blancos y unas zapatillas blancas de horma ancha de la firma Vivobarefoot, una de sus fórmulas de estilo favoritas desde que las deportivas se han colado en sus actividades oficiales a raíz de la fractura en su pie.

Felipe VI ha pasado revista a una formación de la Policía y ya junto a su mujer, que ha permanecido sentada buena parte del acto, han presenciado el salto de dos policías de los GEO que se han precipitado desde el helicóptero con la bandera del Cuerpo. Después, Daniela, de 10 años, y Mauro, de 6, hijos de policías nacionales, han entregado una bandera especialmente confeccionada para la ocasión como regalo institucional a los Reyes, quienes les han agradecido el gesto con grandes muestras de cariño y abrazos, por parte de doña Letizia.

El acto ha continuado con un discurso de Francisco Pardo, director general de la Policía, donde ha incidido que la seguridad es patrimonio nacional. El Rey ha entregado la placa de honor de la Orden del Mérito Constitucional a la Policía Nacional por su actividad al servicio de la Carta Magna y de los valores y principios en ella establecidos de garantizar la seguridad y el libre ejercicio de los derechos a los españoles. Un reconocimiento que ha recogido el director adjunto operativo de la Policía, José Ángel González Jiménez, en representación de toda la institución. También los policías fallecidos en acto de servicio han sido homenajeados con una ofrenda floral, el canto de La muerte no es el final y unas salvas de los GEO. En el último siglo más de 500 agentes han perdido la vida en el cumplimiento de sus funciones.