La Cámpora en crisis por las peleas con Kicillof: ¿Salir a bancar al gobernador u oposición responsable?

El llamado a elecciones por parte del PJ bonaerense levantó un tendal de problemas internos que venían dilatados y destapó la crisis de representación con la que el peronismo viene desde la salida de Cristina Kirchner del poder en 2015.
La Cámpora no escapa a esa crisis y la conducción de Máximo Kirchner se pone en discusión al momento que los alfiles de “la orga” salen a poner en duda al gobernador bonaerense, Axel Kicillof.
Guerra entre ministros por la batalla Kicillof vs Máximo - Provincia Noticias https://t.co/VzXU7PJzQm
— Provincia Noticias (@Pcia_Noticias) May 14, 2024
En público, los referentes camporistas evitan explayarse negativamente sobre Kicillof. Resulta que el gobernador tiene la imagen más aprobada en el peronismo y quienes lo criticaron, quedaron en la puerta. Sin embargo, puertas adentro soslayan críticas que ponen a Kicillof en el precipicio.
Los jefes de la orga tienen un doble objetivo para 2027. Por un lado, quieren instalar un dirigente que sea la sucesión de Kicillof y que imponga el poder sobre el sillón de Dardo Rocha y sea “otro bendecido de Cristina”.
Como viene informando NOVA, Mayra Mendoza es “LA” elegida por Cristina Kirchner y Máximo para competir en territorio bonaerense y marcaría “una continuidad” sobre el gobierno de Kicillof. Para eso, un sector cree que mantener “sintonía fina” con el mandatario es clave y que “se trata de un matrimonio por conveniencia”.
Filas adentro, en La Cámpora le reprochan al gobernador armar un perfil periférico y sienten que están lejos de la forma de construcción que tienen en el espacio. En Gobernación destacan que el mandatario “no tiene que consultar todo a Cristina”, aunque “la escuchamos siempre”.
El segundo objetivo del espacio conducido por Máximo Kirchner es engrosar las filas de intendentes y ganar poder dentro de la Legislatura bonaerense. Por el momento, ostentan 12 intendentes de los 80 que fueron victoriosos con la boleta de Unión por la Patria. Ahora, van por distritos de peronistas díscolos y empoderar a dirigentes de la Primera Sección Electoral.
Además, aspiran a mantener el núcleo mayoritario en la legislatura para garantizar la presidencia, como lo fue los últimos 5 años, primero con Federico Otermin y luego con Alejandro Dichiara. Incluso, sostienen a Facundo Tignanelli, íntimo de Máximo Kirchner, como jefe de bloque oficialista.
Allí radican las quejas de Andrés Larroque, quien señaló que Kicillof “no tiene un diputado” y los inconvenientes para avanzar con proyectos legislativos que busca implementar el ejecutivo.
Lo cierto es que, mientras las discusiones internas suben de nivel, La Cámpora sostiene los lugares de decisión en los ministerios y ocupan segundas líneas en ministerios de importancia, lo que genera una doble incertidumbre en la pelea por la conducción del peronismo.