El Rey Carlos III y Guillermo asistieron al primer compromiso oficial desde el diagnóstico de cáncer del monarca

En un acto celebrado en el Centro de Aviación del Ejército en Middle Wallop, el Rey Carlos III reveló haber perdido el sentido del gusto debido a la quimioterapia. Sin embargo, tanto él como Guillermo, su hijo mayor, se mostraron de buen ánimo, luciendo corbatas a juego y sonriendo mientras conversaban con veteranos. El motivo de la visita fue la entrega del cargo de coronel jefe del Cuerpo Aéreo del ejército británico a Guillermo, un puesto ceremonial que el propio Carlos había ocupado durante 31 años como príncipe de Gales.
Durante la ceremonia, frente a un helicóptero Apache, el rey expresó sentimientos encontrados: "Es una gran alegría estar con ustedes en esta ocasión, aunque sea brevemente. No obstante, el día de hoy también está teñido de una gran tristeza después de 32 años conociéndolos a todos, admirando sus numerosas actividades y logros". Además, Carlos III manifestó su confianza en que el regimiento prosperará bajo el liderazgo de su primogénito: "Lo mejor de todo es que es un muy buen piloto, lo cual resulta alentador".
🇬🇧#ReinoUnido La Monarquía Británica se renueva: El rey Carlos III formaliza el traspaso de Jefe del Cuerpo Aéreo del Ejército a su primogénito, el Príncipe Guillermo. ¿Qué impacto tendrá esta transición en la fuerza aérea británica y en la institución monárquica?🤔 pic.twitter.com/1CjuuhKkBB
— TRIVU (@TrivuTv) May 14, 2024
La formación de Guillermo como piloto en la RAF, donde sirvió en búsqueda y salvamento, reforzó el simbolismo de su nuevo rol. No obstante, la ausencia de mención a Harry, que sirvió en Afganistán con el mismo cuerpo, generó especulaciones.
Antes de que Harry renunciara a sus obligaciones reales, se esperaba que él asumiera este cargo tras la ascensión al trono de su padre. La designación de Guillermo ha sido interpretada como un nuevo desaire hacia el duque de Sussex. Este nombramiento se produjo en medio de tensiones recientes, destacadas durante el breve viaje de Harry a Londres la semana pasada. Aunque se especuló con una reunión entre padre e hijo, finalmente no se concretó.
Un portavoz del príncipe atribuyó la falta de encuentro a la apretada agenda de Carlos III, quien, además de continuar con su tratamiento, presidió la primera fiesta en el jardín del Palacio de Buckingham de 2024, a solo tres kilómetros de la ceremonia de Harry en la catedral de San Pablo. Según fuentes cercanas al rey, este ofreció a Harry alojarse en propiedades reales, aunque el duque no aceptó la invitación.
La salud del monarca no ha impedido que continúe con sus compromisos. Durante el evento, Carlos III develó una placa conmemorativa de un Apache AH Mk1, utilizado en Afganistán, ahora parte del Museo de Aviación del Ejército.
Guillermo no perdió tiempo en asumir su nuevo rol. Vestido con el uniforme militar, se reunió con la tripulación, recibió instrucciones del teniente general Nicholas Borton y presenció ejercicios de entrenamiento. Finalmente, haciendo gala de su experiencia aeronáutica, abandonó el centro a bordo de un Apache.
En medio de las tensiones familiares, el compromiso y profesionalismo del rey y su hijo mayor destacan, mientras los ecos de las decisiones reales continúan resonando dentro y fuera de la familia.