Victoria Villarruel puede ser la Julio Cobos de este gobierno

Por Gustavo Zandonadi, especial para NOVA.
El régimen tuvo ayer uno de sus peores días desde que asumió. Este miércoles el país fue testigo de la ausencia de los diputados oficialistas y sus aliados del Pro, que hizo fracasar una sesión para tatar la un nueva fórmula para el haber jubilatorio, días después de los repudiables dichos de la canciller Diana Mondino sobre la clase pasiva. Para cerrar, Victoria Villarruel llamó a sesión especial en el Senado incluyendo el tratamiento el nefasto DNU 70/2024, siendo de público conocimiento que La Libertad Avanza quedaría expuesta a otra derrota parlamentaria, tal como sucedió con la Ley Ómnibus en Diputados.
El "campeón de la moral" -tal como lo definió con sarcasmo su exaliado Carlos Maslatón- vio como su tropa en Diputados, con la ayuda de sus aliados del Pro, hicieron caer una sesión en la Cámara Baja convocada para tratar una nueva fórmula el haber jubilatorio. Al cabo de media hora de espera el presidente de la Cámara, Martín Menem, dio por terminada la reunión por falta de quórum. Los liberales abandonan a su suerte a los jubilados con un ingreso miserable, porque ya lo dijo Diana Mondino: "se van a morir". ¿Hace falta agregar algo más? Lo que hicieron es imperdonable, pero los pinta de cuerpo entero.
El arma letal del régimen para avanzar contra las clases media y trabajadora corre serio peligro en la Cámara Alta y en Balcarce 50 lo saben. La sensación de derrota inminente es tal que a última hora de ayer la Oficina del Presidente emitió un comunicado en el que aprecia que "el potencial rechazo del DNU, que actualmente se encuentra próximo a su definición de la Corte Suprema de Justicia, conllevaría un grave retroceso en los derechos y necesidades del pueblo argentino". Perdido por perdido el régimen le marca la cancha a la vice: "El Gobierno Nacional espera que el Poder Legislativo no se deje cautivar por el canto de sirena de quienes pretenden 'anotarse' victorias de corto plazo".
Lo que en verdad espera el régimen es que el Senado no se ponga a trabajar. El presidente demuestra que la independencia del Poder Legislativo no le sirve, porque éste debe funcionar como un contrapeso y de ser necesario, como un dique de contención. Es incompatible con el sistema republicano pretender anular a uno de los poderes para delegar en otro facultades que no le corresponden, pero en el mundo Milei eso no es un problema, con más razón si lo puede solucionar en Twitter. La vicepresidente fue objeto de crueles ataques por parte del ejército de trolls mileistas y el presidente dijo que el rechazo del plexo serviría para desenmascarar a los que no quieren el cambio.
La vigencia del DNU le complicó la vida a los argentinos desde el minuto cero. Salvo la parte atinente a la reforma laboral -actualmente suspendida por la justicia- el resto del cuerpo está vigente. El aumento descomunal en las prepagas desde el 29 de diciembre del año pasado hasta el día de hoy, la desaparición de las leyes de Góndolas y de Abastecimiento y la desprotección en la que cayeron los millones de inquilinos por la derogación de la Ley de Alquileres. La ley de locaciones urbanas no era buena, pero al menos no dejaba los locatarios en el más absoluto desamparo, como están ahora ¿Pero por qué sería Villarruel la encargada de tirar por a la basura el Santo Grial mileista?
El diputado José Luis Espert fue invitado al piso de La Nación Más. Luis Novaresio le preguntó si creía que Victoria Villarruel busca desestabilizar al Gobierno, pero el legislador no pudo responder: “No sé. Me genera dudas” señaló. El rosarino respondió que "es grave" que un integrante de bloque oficialista no pueda rechazar en forma contundente un planteo que ponga en duda la sinergia entre el presidente y su vice. La palabra de Espert tuvo lugar en el marco de una entrevista en con Pablo Rossi y Luis Majul en la que dejó en claro que La vicepresidenta no tenía obligación de convocar a la sesión de mañana por más que haya juntado las cinco firmas” y agregó que no sabe por qué convocó, de ahí su desconfianza.
La historia se empecina en trazar un paralelo entre el primer gobierno de Cristina Kirchner y el régimen actual. El 11 de marzo de 2008 el ministro de Economía Martín Lousteau dio a conocer la Resolución 125, modificando el esquema de retenciones al agro. La medida puso al campo en pie de guerra y el final llegó cuando la resolución se convirtió en proyecto de ley, discutido en el Congreso. El vicepresidente Julio Cobos votó en contra de lo que envió su propio gobierno y la 125 murió. ¿Qué pasará con el DNU 70? Si la sesión de hoy lo rechaza, el presidente quedará debilitado y Victoria Villarruel sería su Julio Cobos, pero si el decreto avanza, la sospecha caerá sobre los senadores.