Por Luis Gotte, especial para NOVA
Ellas son nuestras hermanas
nuestras madres, nuestras hijas,
ellas son nuestras compañeras
nuestras amigas, nuestras vecinas.
Ellas no son mercancía
ni objetos de placer,
ellas son personas decentes
que merecen respeto y dignidad.
Ellas no son invisibles
ni números sin nombre,
ellas son seres queridos
que tienen historias y alegrías.
Ellas no son culpables
ni responsables de su suerte,
ellas son víctimas inocentes
de un sistema cruel e impune.
Ellas no están solas
ni abandonadas a su destino,
ellas tienen nuestra lucha
y nuestra memoria y compromiso.
Ellas necesitan justicia
verdad y reparación,
ellas exigen que los gobiernos
creen un Tribunal Penal Regional.
Ellas quieren que las busquen
y que las encuentren,
ellas quieren que las liberen
o poder descansar en paz.