El texto, basado en el testimonio del Primer Ministro de la República de Annobón, Orlando Cartagena Lagar, detalló el impacto devastador de la epidemia que en menos de dos meses acabó con un tercio de la población de la isla.

La falta de atención sanitaria, el bloqueo de la ayuda internacional y la escasez de recursos agravaron la crisis hasta niveles insoportables, dejando las calles vacías y sumiendo a la comunidad en un profundo dolor.

“Las calles se quedaron vacías, sin ningún niño jugando, ningún hombre yendo a la playa a pescar y ni un solo cayuco, símbolo de la presencia de pescadores de la isla”, escribió Martínez Pereda en su cuenta de X.

Sin embargo, el esfuerzo del historiador por visibilizar esta tragedia fue respondido con amenazas veladas por parte de algunos seguidores del régimen. Un mensaje de un usuario identificado como Nzé lanzó una amenaza alarmante, diciendo:

“Tendríamos que eliminar a ese tipo”, refiriéndose a Martínez Pereda. Este comentario también vinculó a la figura de Orlando Cartagena Lagar con una narrativa conspirativa, cuestionando la legitimidad de la designación de un "Primer Ministro de Annobón" y atacando a quienes han mostrado solidaridad con la causa annobonesa.

Las amenazas han desatado una ola de apoyo hacia Martínez Pereda, quien ha sido reconocido por su compromiso con la verdad histórica y la justicia social.

La intimidación contra el historiador refleja, según varios analistas, el temor del régimen a que se difundan las graves violaciones de derechos humanos sufridas por el pueblo annobonés a lo largo de su historia.

La comunidad internacional y diversos organismos de derechos humanos han condenado estas amenazas y expresado su solidaridad con el historiador.