Sandra Gutiérrez detalló que el incumplimiento de Morales para declarar dentro del plazo establecido justificó la reactivación de la orden de detención. Sin embargo, la Policía informó que su ejecución ha sido complicada debido a la resistencia de los seguidores del exmandatario en el Chapare. Las fuerzas de seguridad enfrentaron agresiones durante los bloqueos, lo que llevó a priorizar la protección de los agentes. La fiscal subrayó que la investigación está centrada en resguardar los derechos de la presunta víctima, descartando motivaciones políticas.

El caso también ha tenido repercusiones fuera de Bolivia. En Argentina, se investiga a Morales por delitos similares durante su estadía en 2019, cuando fue acogido como refugiado por el expresidente Alberto Fernández. Mientras tanto, Morales ha declarado que cuenta con el resguardo constante de al menos 500 personas en el Chapare, lo que refuerza las dificultades para proceder con su aprehensión.

La fiscal Gutiérrez también reveló que anteriormente fue apartada del caso por el entonces fiscal general Juan Lanchipa, quien bloqueó una orden de captura contra Morales. Tras su restitución, y con la renuncia de Lanchipa, la investigación se retomó. La Policía señaló que Morales no ha sido localizado pese a operativos de vigilancia en sus domicilios. "Estamos frente a un proceso complejo, pero con fundamentos sólidos para proceder judicialmente", concluyó la fiscal.