Para algunos se terminó la crisis: Javier Milei tuvo un sorprendente aumento patrimonial en 2024
Por Gustavo Zandonadi, especial para NOVA
En un contexto de creciente empobrecimiento, que contradice el optimismo del gobierno respecto al fin de la recesión, se conoció que el patrimonio del Presidente aumentó significativamente en el último año. Según su última declaración jurada presentada ante la Oficina de Anticorrupción (OA), Javier Milei declaró un patrimonio de 125 millones de pesos, un aumento del 498 por ciento respecto a los 21 millones informados en su declaración anterior.
Uno de los aspectos más llamativos de esta variación patrimonial es la revalorización de sus bienes inmuebles y vehículos. Según informó el sitio Chequeado.com, "En su declaración anterior, el Presidente había informado que su casa en la Ciudad de Buenos Aires y sus dos autos tenían un valor de 12,7 millones de pesos. Sin embargo, en la reciente declaración, estos mismos bienes fueron valuados en 40,1 millones de pesos". Esta significativa revalorización plantea dudas sobre los criterios utilizados para la tasación y si estos reflejan el valor real de mercado.
Además de la revalorización de sus bienes, otro factor clave en el aumento patrimonial del Presidente son sus ahorros. Siguiendo la información de Chequeado.com "En su declaración anterior, había informado ahorros en pesos y 20 mil dólares en efectivo. En la más reciente, además de mantener estos ahorros declaró una caja de ahorro en dólares con más de 65 mil", que en su declaración anterior no estaba. Este incremento en sus ahorros en moneda extranjera es particularmente llamativo en un momento en que la mayoría de los ciudadanos enfrenta enormes dificultades para llegar a fin de mes, al punto de tener que vender sus dólares para complementar sus ingresos de miseria.
A pesar de ser esto un escándalo, el tema pasó inadvertido. Los medios complacientes no se hicieron eco del incremento patrimonial incremento presidencial. A muy pocos periodistas le llamó la atención. En un país en que 182.000 trabajadores perdieron su empleo, en donde 50 pymes por día bajaron la persiana en el último año, donde se le niega un pedazo más de pan a los jubilados (y se los reprime al mismo tiempo que escribo estas líneas), donde se recorta el financiamiento a las universidades, donde se fulmina con aumentos despiadados a la clase media y donde se recortan derechos a los trabajadores, el patrimonio presidencial no es un tema noticiable.
Si Milei hubiera sido peronista, sin dudas, la primera plana de los diarios de mayor tirada estaría inundada de virulentos títulos, cuidadosamente elaborados para exasperar el ánimo de los lectores, pero no. Eso no está pasando en este momento. La agenda periodística pasa por otro lado, tratando de disimular cuestiones que podrían ser molestas para el gobierno, prolongando la luna de miel que -inexorablemente- llegará a su fin si la economía sigue sin arrancar, como hace pocos días lo pronosticó el FMI, esperando una caída del PBI argentino en el orden del 3,5 por ciento. Se vienen días aciagos, pero no para todos los argentinos.