En esta ocasión, la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) resolvió primerear a las demás representatividades que nuclean a los trabajadores de la educación a nivel nacional y llamó a la hermandad educativa a sumarse a las filas de esta jornada propuesta para el 30 de octubre. Como no podía ser de otra manera, Salta no quedó al aire y ya el secretario general de la Asociación Docente Provincial, Fernando Mazzone, mejor conocido como “El padrino”, por sus aprietes cuasi mafiosos a la docencia, ya mandó a sus súbditos a hacer todo el circo de publicidad para llamar, mediante fotitos, cartelitos, mensajitos a sumarse a los maestros, desde sus lugares de trabajo, para luego enviarlos a un determinado número de Whatsapp. Una forma inteligente y encubierta de tomar lista a los afiliados, para que luego no sufran persecución por no hacer lo que Fernando Corleone (perdón Mazzone) diga.

Dicen por ahí que el poderoso se vuelve fuerte por la cobardía del débil, sino basta con mirar las ruinas del ex secretario general de AMET, Eloy Vidal Alcalá, quien, después de haber sido la cabeza de las manifestaciones docentes en Salta, allá por el 2014, cuando Mazzone era el “achichincle” de la entonces Secretaria General, Patricia Argañaraz, hoy no es más que la sombra que lleva el “chalequito” de ADP como para hacer un poco de bulto a la poca gente que suma el sindicato docente en cada convocatoria. Triste pero cierto y en esta ocasión no difiere de las anteriores ya que Eloy se ocupó de distribuir el material publicitario de CTERA.

Quien está muy conforme con esta situación es el propio Mazzone, ya que aseguran por ahí, que no es fácil, tener lacayos como Alcalá y otros, que se ocupan de hacer el trabajo sucio, muchas veces, cayendo en el conventillo barato de la difamación a todo aquel que no comulga con sus ideas. Todo esto y más por la promesa bohemia de algún día volver a ser, en su imaginario por supuesto, el hombre poderoso que supo integrar la lista 210 bajo el simpático y amigable apodo de “El Profe”, para una banca en Diputados de la Provincia, quien dicho sea de paso sacó la miserable suma de 4391 votos que no le alcanzó ni para el piso del patio de su casa. Con decir que sacó menos que el partido Obrero (eso ya es mucho decir). O tal vez sueña, con volver remasterizado, en la figura de algún profesor sediento de ocupar el puesto de Secretario General de AMET Salta.