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Gran Bretaña denunció al régimen de China por interferencia de asuntos internos: "Es inaceptable"

El premier británico Rishi Sunak se reunió con el primer ministro chino Li Qiang tras conocerse la detención de dos hombres sospechosos de espiar para Beijing, en lo que sería una de las más graves violaciones de la seguridad de un Estado.

El primer ministro Rishi Sunak acusó el domingo a China de interferencia “inaceptable” en la democracia británica, luego que un diario reportó que un investigador en el Parlamento fue arrestado por sospecha de espiar para Beijing.

Sunak dijo que habló del tema este domingo con el primer ministro chino Li Qiang cuando se vieron en la cumbre del Grupo de los 20 en India.

“Expresé mi consternación profunda por cualquier interferencia en nuestra democracia parlamentaria, lo que es obviamente inaceptable”, afirmó el británico en delcraciones a la prensa.

Los dos líderes se reunieron luego que la Policía Metropolitana confrmara que un hombre de unos 20 años y otro de unos 30 fueron arrestados en marco bajo la Ley de Protección de Secretos. Ninguno fue instruido de cargos y ambos salieron en libertad mientras cursa la investigación.

El diario Sunday Times reportó que el hombre más joven era un investigador parlamentario que trabajó con legisladores del Partido Conservador, incluyendo Alicia Kearns, la actual titular de la Comisión de Relaciones Exteriores, y su predecesor en ese cargo, Tom Tugendhat, quien es ahora el ministro de seguridad.

El diario reportó que el sospechoso tenía un pase que le daba acceso irrestricto a los predios del Parlamento y que es dado a legisladores, sus asistentes y periodistas tras un examen de seguridad.

Las tensiones entre China y Gran Bretaña han ido en aumento en años recientes ante acusaciones de espionaje económico, violaciones de derechos humanos y la represión china en la ex colonia británica de Hong Kong.

Los conservadores británicos están divididos en cuanto a qué política tener hacia China y cuánto acceso se le debe dar a las compañías chinas a la economía británica. Algunos conservadores de línea dura quieren que China se considerada oficialmente una amenaza, pero Sunak solo se ha referido al creciente poder de Beijing como un “desafío”.

“Planteé una serie de preocupaciones diferentes que tenemos en áreas de desacuerdo, y en particular, mi fuerte preocupación por cualquier interferencia en nuestra democracia parlamentaria, que es obviamente inaceptable”, dijo Sunak a las emisoras británicas sobre su reunión con Li al margen de la cumbre del G20 en India.

“Lo correcto es aprovechar la oportunidad de entablar un diálogo para plantear las preocupaciones de forma específica, en lugar de limitarse a gritar desde la barrera”, añadió.

Por su parte, el enviado de Xi Jinping afirmó que ambos países deberían abstenerse de mezclar el comercio y la cooperación económica con la política y la seguridad, según la agencia estatal china de noticias Xinhua.

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