Ya se han organizado varias protestas contra el proyecto, mientras que más de noventa grupos de derechos de los inmigrantes y cientos de activistas individuales han firmado una carta abierta al Ministro del Interior pidiendo que se elimine la cárcel.

La llegada de la enorme embarcación, que fue botada al mar en 1976, casi coincidió con la aprobación por parte de la Cámara de los Lores del no menos controvertido proyecto de Ley de Inmigración Ilegal. El texto faculta al Ejecutivo británico a enviar a terceros países a los extranjeros que lleguen irregularmente a su territorio y les niega la posibilidad de obtener la nacionalidad a futuro.

En sus 222 habitaciones y tres pisos, la Bibby Stockholm albergará unas 500 personas. Las autoridades británicas han informado que, de entrada, la nave se utilizará para acoger únicamente a solicitantes de asilo de sexo masculino, que no tengan familia con ellos y cuyas edades oscilen entre los 18 y 65 años. Se espera que los primeros 50 inmigrantes sean trasladados a la barcaza este mes y que permanezcan allí hasta que los funcionarios del Ministerio del Interior den respuestas a sus peticiones de refugio.