
Por Alejandro Pagliero (*)
Como adelanto puedo decirte que sí, estamos a buenos precios para comprar dólar MEP en 480 pesos (cotización al 21 de junio pasado), pero déjame comentarte el por qué de esta conclusión.
El contexto actual podemos definirlo en cuatro variables: elecciones presidenciales, inflación, reservas y FMI.
Históricamente los años electorales han sido volátiles para la economía y las finanzas argentinas, ya que la gran mayoría de las veces los cambios de gobierno han sido acompañados de medidas de shock. Tanto para la liberación del tipo de cambio (devaluación), como todo lo contrario, un proteccionismo rígido usando cepos y regulando los mercados.
El resultado de cualquiera de estos extremos siempre llevó a los ahorristas a dolarizar, ya sea porque preveían una devaluación o la imposibilidad futura de comprarlos.
Viniendo de un período de cepos, el consenso general es que el próximo gobierno necesitará devaluar y liberar, aunque sea en parte, el acceso a la compra de dólares mediante el canal oficial.
Esta medida estaría apoyada por el FMI, ya que su intención es unificar los diferentes tipos de cambio que coexisten hoy en el país.
Siguiendo las reservas del Banco Central, podemos observar pérdidas en su saldo de dólares en lo que va del año, lo cual afecta el respaldo de la moneda nacional.
¿Por qué esto es importante?
Las reservas que un Banco Central tenga en divisas, oro, títulos, etcétera son el respaldo que la moneda del país necesita para mantener su poder adquisitivo. Por ejemplo, el franco suizo es considerado la moneda por excelencia como reserva, ya que el Banco Central Suizo contiene grandes reservas de metales preciosos, títulos y divisas. Lo cual le permite respaldar fuertemente su moneda.
Si sumamos las reservas en dólares más las reservas en bonos, podemos obtener que el tipo de cambio CCL podría ubicarse cercano a los 600 pesos y el MEP en 575 pesos como precio de equilibrio. (Este cálculo es orientativo, para saber dónde estamos parados. El tipo de cambio bursátil está ligado a la oferta y demanda en cada momento).
Conclusión
Para cerrar la nota, podemos ver al índice de la inflación, la cual dio 7,8 por ciento en mayo, menos de lo previsto, pero en valores sumamente altos.
La inflación y la devaluación suelen retroalimentarse. Por lo tanto, en este momento consideramos que las variables apuntan a una apreciación del dólar respecto al peso argentino.
(*) Asesor financiero de Nasini S.A.