El infarto que sufrió Jorge Rial en Bogotá volvió a centrar la atención en un capítulo de su pasado: su relación con Silvia D´Auro, la mujer con quien adoptó a sus hijas y que, tras la separación rompió vínculo con ellas para siempre y se fue de Buenos Aires para nunca más volver.
Y a pesar de que hoy es poco lo que se sabe de Silvia D´Auro, quien se instaló en Punta del Este, donde vive de rentas, años atrás supo ocupar un lugar protagónico en todo lo que hacía a los negocios de Jorge Rial. Luis Ventura estaba muy cerca de la pareja en ese entonces y hoy puede dar fe de cómo se manejaban a la hora de gestionarlos.
Luis Ventura habló a fondo de la desaparición de Silvia D'Auro de la vida de Morena y Rocío Rialhttps://t.co/EmZYM4jgfw#ChubutParaTodos #LuisVentura #MorenaYRocíoRial #SilviaDAuro pic.twitter.com/PGHd23CrRu
— Chubut Para Todos (@Chubutparatodos) May 5, 2023
“Nosotros hicimos muchos negocios, que me conste a mí, siempre lícitos”, dijo el periodista en A la tarde, antes de recordar una anécdota con la ex esposa del conductor de Argenzuela que ilustra el modo en el que ella seguía de cerca estos temas
“Una vez llegó a la radio un compromiso que me lo había acercado Mateyko, que era una pauta de siete mil dólares mensuales por tres meses. Eran veintiún mil dólares, que entraban a la productora de Rial que encabezaba Silvia D’Auro”, indicó Luis Ventura.
“Yo le llevé los veintiún mil dólares a Jorge en un sobre, sin tocar un centavo, y él me derivó a D’Auro. Ella tomó el dinero, me dio las gracias y me dijo que después hablábamos. Pasaron los días y Silvia me trajo un sobre en concepto de ‘mandarle un regalo a mis hijos’, adentro había cincuenta dólares”, avanzó.
Luis señaló que, en ese momento, recibir ese sobre no le pareció “justo”: “Yo había conseguido la pauta, así que se lo devolví y le dije ‘comprale vos regalos a las nenas’, te lo agradezco. Y ahí entendí que los negocios eran todos para esa productora, y que a mí no me correspondía”.
En tanto, Ventura aseguró que nunca volvió sobre ese tema, que nunca planteó ni hizo ningún tipo de reclamo a la entonces pareja. “Todo los negocios que entraban eran para ellos, entonces yo arreglaba lo mío antes”, dijo. Y explicó: “Por eso, por ejemplo, cuando yo firmaba con Fort, era mío, si después había una expectativa que repartiera, no correspondía, porque era mío”.