En muchos países como África matan a miles de elefantes para quitarles sus colmillos los cuales, son de marfil, muy codiciado por los traficantes de animales, que pena y que vergüenza que los africanos y millones de personas en el mundo le hagan daño a los animales solo para satisfacer sus deseos económicos y personales, los colmillos de los elefantes son usados para realizar obras artesanales o artísticas.

Incluso, debido a la caza y matanza ilegal de elefantes están naciendo varios elefantes sin colmillos, lamentablemente se está modificando la genética de los elefantes, los seres humanos en el mundo son tan insensibles al dolor animal, muchos seres humanos ni siquiera saben a qué vinieron a este mundo, el ser humano se reproduce solo para hacerle daño a los animales, porque la mayoría de las personas ni siquiera saben qué hacer con sus vidas, son unos inadaptados al ocasionar daño a los animales.

En una ocasión visité Tuxtla Gutiérrez Chiapas, México, y quedé encantado con el Estado mencionado, me senté una tarde en el parque del centro de la capital de Chiapas a escuchar los hermosos cantos de los loritos que aun existen en esa zona, para las personas locales es normal y natural escucharlos por las tardes, es tan hermoso escucharlos que relaja a cualquiera que los oye, el reino animal es tan hermoso que no debemos extinguirlo.

Hay varias especies de aves y ellos se acercan a nosotros para convivir y que los alimentemos, varias personas usan ese pretexto para tomarlos, robarlos y venderlos o matarlos y eso, es en todo el mundo, el ser humano es insensible al dolor animal, ni siquiera saben si el animal que cazan tiene hijos y los han dejado solos, es exactamente igual cuando una mujer sale a trabajar y deja a sus hijos solos y no se sabe si va a regresar, claro, en México no se sabe si las personas van a regresar a sus casas, es el país mas peligroso de América Latina, ahí no se puede invertir porque el sistema tributario fiscal es un verdugo y acosador para los inversionistas y quienes intentan tener mas dinero que los otros aunque trabajen honradamente los hostigan.

Sin embargo, afortunadamente en México hay leyes que protegen a los animales pero, es letra muerta, la mayoría de los funcionarios que protegen a los animales no hacen su trabajo, ya que en varios lugares de México hay dependencias que se dedican a recoger perros de la calle para 15 días después sacrificarlos o venderlos a los taqueros callejeros en México, se ha descubierto en Ciudad de México, México, que varias taquerías operan vendiendo tacos en la madrugada precisamente porque a esa hora no hay vigilancia de parte de las autoridades y es cuando incluso, los mismos taqueros ese tipo de carne de perro se lo pueden vender a gente humilde o borrachos que salen de los bares a altas horas de la noche, y lo peor aún, que cuando a uno no le gusta los tacos y le decimos al taquero que su carne es rara se enojan y hasta violentos se ponen, varios taqueros mexicanos son unos verdaderos traficantes de carne de perro como lo es en Mozambique, África con la caza ilegal de elefantes para poder despojarlos de sus colmillos y venderlos.

En México también se vende el huevo de tortuga el cual es delito venderlo, por lo regular es muy común al sur del país cazar tortugas, matarlas y cocinarlas en tamales, lo peor aún, lo peor, hace 7 años fui testigo de como una señora mató a una tortuga, por más que le dije que la liberara no lo hizo, es criminal matar una tortuga, calientan agua y una vez que está hervida meten a la tortuga viva y ahí en agua caliente se cuece y se muere.

Es algo tan despiadado por la gente insensible al dolor animal, yo en lo personal quedé marcado para toda mi vida el haber visto como mataban esa inocente tortuga, en silencio lloré porque no pude hacer nada por ella, lloré de rabia y de impotencia a la vez, pero en silencio, para ellos es normal matar una tortuga de esa manera, para mí no, no hay ningún justificante en el mundo para poder dañar un animal y matarlo, somos unos verdaderos depredadores, cuando iba a la preparatoria y poder pagar mis estudios puse una pollería, venta de pollo fresco, compré 120 pollos para matarlos y venderlos, no tuve ese corazón para hacerlo, a la mañana siguiente que los compré cuando los vi, se me quedaban viendo, no maté a ninguno, los regalé a todos porque no puedo dañar un animal, sea cual sea, yo no me atrevo a dañar a ningún animal, cambié de giro en cuestión de negocios para poder pagar mis estudios, pero dañar a un animal, nunca.

Lo cierto es que, el tráfico ilegal de vida silvestre se constituye en nuestro país México como un delito en la legislación ambiental, en el cual, involucra, extracción, acopio, transportación comercialización y posesión de especies diversas, debemos todos respetar a los animales fuere cual fuere la especie en el mundo.