La joven modelo, de 29 años, Natalia Belen Giles Venencia, vive en Avellaneda, en la provincia de Buenos Aires. En diálogo con NOVA comentó que le empezó a gustar la profesión “desde chica, miraba desfiles y siempre soñé con serlo”.
“Mi familia no tenía los recursos para que yo pudiera ser modelo, hasta que crecí y empecé a trabajar. Ahí me pude empezar a comprar zapatos, ropa e ir poco a poco cumpliendo mi sueño”, dijo.
Además, resaltó que “empecé publicando fotos en Instagram, Facebook y mis seguidores siempre me tiraban buena onda. Empecé a recibir propuestas fotográficas para convocarme a diferentes eventos y además, me invitaban a escuelas para irse formando como modelo”.
“Lo elegí porque me gusta sacarme fotos, hacer innovaciones y que a la gente le guste. Es algo hermoso, las fotos son como una terapia. El modelaje te lleva a querer verte bien, cuidarte, estar divina”, dijo.
Lo que más la atrapó fue “el arte del modelaje, lo que la mujer puede reflejar a otras personas en cada foto, a través de cada expresión”. "Agradezco a @Javi_b_good @andres pujolle @fotografia_boudour @dan.v.ran, quienes me han sacado fotos durante mi carrera. Soy agradecida a Dios por abrirme puertas y poder haber llegado hasta acá y voy por más", concluyó.