El columnista invitado
Un paso hacia el desarrollo

El rediseño imperialista del mañana

Es urgente una Argentina federal y con Municipios autónomos, fuertes y organizados, que recupere su soberanía alimentaria y el dominio de sus recursos mineros.

Por Luis Gotte, escritor revisionista

Algunos observadores creen que Xi Jinping desafiará la hegemonía del dólar para crear una zona económica distinta. El yuan, o moneda similar, puede surgir como espacio alternativo en las nuevas economías soberanistas, o nacionalismo posglobal.

Es necesario y determinante que sea así, porque es el único camino que puede proteger al nuevo Imperialismo Chino, ex república popular, ante cualquier intento de sanción de la OTAN-USA, si decide anexar Taiwán.

Incluso, como mecanismo de defensa ante un posible surgimiento de una OTAN-asiática con base en Tokio. Solo en Japón puede establecerse armas nucleares, si eligieran Seúl se generaría un grave conflicto con Corea del Norte.

La confrontación Ucrania-Rusia, por tanto, podría rediseñar el nuevo mapa económico y financiero internacional, donde Kiev (Ucrania) marcará los límites terrestres que, seguramente, negociarán desde una nueva Conferencia de Yalta.

Se reedita la "Guerra Fría 2.0". Un mundo dividido, en realidad ya lo estamos entre pueblos subordinantes y subordinados, ricos y pobres, los que mandan y los obedientes, ahora dirán que será entre países libres y democráticos contra países totalitarios. Nos preguntamos, por lo que vimos cómo actúa la prensa internacional y la vernácula, ¿dónde queda el mundo libre y democrático?

Mientras en Argentina, todos expertos en eso de dividir y crear guerras frías, estamos lejos de alcanzar un razonamiento lógico para comprender, distinguir, apreciar y resolver nuestra política interna, de acuerdo a los cambios que se dan en la política internacional, que es la única válida y real.

No aprendemos, porque estamos dominados por nuestras pasiones. Hoy debatimos quién será nuestro verdugo para 2023. Si morimos por ahorcamiento o fusilamiento.

Es urgente una Argentina federal y con Municipios autónomos, fuertes y organizados, que recupere su soberanía alimentaria y el dominio de sus recursos mineros, trabajando en colaboración y cooperación con el campo y su producción, junto al INTA, a SENASA, el INTI, el INIDEP y un CONICET desideologizado, supeditado a los grandes objeticos de la Patria…no desde un nacionalismo de patria chica, sino de Patria Grande. De un nacionalismo continental hispanoamericano.

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